3 mil pesos es el costo que llegan a tener algunos centros de rehabilitación por semana para atender a pacientes adictos que son internados por sus familiares, pero algunos operan clandestinamente.
Una alta demanda es la que están teniendo los Centros de Rehabilitación mejor conocidos como anexos en la localidad, pues el problema con las adicciones sobre todo por el consumo de cristal es algo a lo que se enfrenta gravemente la comunidad y al mismo tiempo los centros clandestinos surgen como pan caliente.
De acuerdo a una investigación por parte de periódico El Tiempo algunos centros de rehabilitación cobran entre mil y hasta 3 mil pesos semanales por cada interno, y según los médicos un paciente de manera general puede necesitar mínimo 3 meses de tratamiento para dejar las adicciones, lo que quiere decir que un anexo con cuota de 3 mil pesos ganaría 144 mil pesos en un solo interno.
Irregularidad. El director de Salud Municipal, Arturo González comentó que, es lamentable la probabilidad que personas perciban estos centros de rehabilitación como un negocio con fines de lucro sin tener la mera intención de poner fin a las adicciones, pero es la Secretaría de Salud el organismo que debe encargarse de corroborar que estén teniendo un buen funcionamiento y todo marche en orden. Además, en cuanto la intervención que él ha tenido en algunos ciudadanos interesados en formar este tipo de centros, se ha percatado que son gentes quienes buscan relatar su testimonio y experiencias personales con las drogas y con base en ello lograr generar un cambio en los adictos interesados.
El director calcula que existen posiblemente 10 anexos, aunque probablemente no todos cuentan con sus permisos, ya que, por otra parte, el jefe de Jurisdicción Sanitaria 04, Faustino Aguilar Arrocha, ha dado a conocer que únicamente tienen 6 regulados y en orden, por lo que no se descarta que existan algunos funcionando sin contar con las autorizaciones necesarias.
También el alcalde Mario Dávila ha mencionado que probablemente existan hasta 30 centros de este tipo, pero recalcó que no es su responsabilidad su funcionamiento, sino de la Secretaría de Salud. Y con base en la experiencia del director municipal sostuvo que para la aprobación de funcionamiento de un anexo se necesitan permisos de Ecología, Protección Civil y la Secretaría de Salud siendo este organismo el más importante, ya que ellos son quienes se encargan de verificar se cumpla con los protocolos de salud tales como asegurarse de una buena participación de médicos certificados o personal de psicología, y si ellos no lo aprueban de ninguna manera puede operar.
Problema. Recientemente, el secretario de Salud en el Estado, Eliud Aguirre Vázquez dio a conocer que, en Coahuila existen al menos 200 anexos, pero únicamente tienen registrados 76 lo que quiere decir que el resto se mantiene operando de manera clandestina y es por ello que se pide la intervención de la ciudadanía para no cometer el error de llevar a sus familiares en este tipo de anexos.
Estadísticas. Diariamente, el departamento de Seguridad Pública en Monclova realiza de 5 a 10 detenciones en adictos que se encuentran consumiendo cristal, pues es la droga que mayormente está circulando en la localidad debido al precio tan bajo que llega a tener y los efectos secundarios que tiene en los consumidores.
Por lo que se deja ver como los oportunistas seguirán aprovechando para fundar estos centros y no seguir ningún tipo de permiso mientras que, a la Secretaría de Salud no le queda más que esperar a recibir una queja o reporte por parte de familiares de internos para poder acudir y verificar lo que está ocurriendo tal y como ya ha sucedido en ocasiones anteriores en la localidad en donde algunos anexos como ‘Impacto de fe’ o ‘Escudo de salvación’, ’VIBE’, etc., han sido involucrados en casos de maltrato y hasta presuntos homicidios al mismo tiempo de no contar con todos los permisos necesarios.