"Rusia debe aclarar su muerte y poner fin a la inaceptable represión de la disidencia política".
Los ministros de Exteriores de las naciones industrializadas que forman el G7 rindieron hoy tributo al fallecido líder opositor ruso Alexéi Navalny en la reunión que mantienen en los márgenes de la Conferencia de Seguridad de Múnich.
El jefe de la diplomacia italiana, Antonio Tajani, pidió a sus colegas que antes de iniciar la reunión, la primera bajo la presidencia de Italia del grupo, se guardase silencio para honrar al disidente fallecido este viernes en prisión.
"Por sus ideas y su lucha por la libertad y la corrupción en Rusia, Navalny fue llevado a la muerte. Rusia debe aclarar su muerte y poner fin a la inaceptable represión de la disidencia política", dijo Tajani, también vicepresidente del Gobierno italiano.
Los jefes de las diplomacias de Estados Unidos, Canadá, Francia, Reino Unido, Alemania, Japón e Italia debaten hoy en Múnich sobre la crisis en la Franja de Gaza y sus efectos en Medio Oriente, así como sobre la situación en el mar Rojo, además de mantener su apoyo a Ucrania.
Navalny murió el viernes inesperadamente a los 47 años en la prisión ártica en la que se encontraba desde diciembre pasado, según informaron los servicios penitenciarios de Rusia.