El obispo de Saltillo, Hilario González, hizo un llamado a los fieles a dejar la esclavitud durante este periodo de Cuaresma y dedicarle más tiempo a Dios.
“Cada quien tiene que ver en lo que está esclavizado, lo que le quita tiempo para estar con Dios y con los demás, yo creo que cada uno de nosotros va encontrando que sacrificios puede hacer, no es una actitud de masoquista, sino una actitud que nos libera en el espíritu para poder servir a los demás”, dijo. Con una misa matutina y la imposición de ceniza, el obispo dio por iniciado el periodo de Cuaresma de este año.
Al respecto, recordó que este periodo es un tiempo de conversión y gracia para volver la vida y el corazón a Dios. Agregó que es también un tiempo de lucha interna para vencer aquello que está mal en la vida propia y para ayudar al más necesitado. Recordó a los católicos llevar a cabo las prácticas tradicionales de la Cuaresma como la oración, el ayuno y la limosna. “La oración para crecer en la fe en el diálogo con Dios: la lectura y meditación de la palabra de Dios, nuestras oraciones tradicionales, el rosario, el viacrucis que nos ayuden a madurar en la fe y darnos cuenta el gran amor que nos tiene”, mencionó el obispo. Continuó, “el ayuno para animar nuestra esperanza y nos recuerde esa hambre y sed de encontrarnos con Dios y que eso nos dé la esperanza de llenarnos de su presencia; y la caridad, la más importante.