Saltillo, Coahuila, MÁS. – El Estado afina su estrategia de seguridad, de acuerdo con información del titular del área, Federico Fernández Montañez, la instalación de varios arcos carreteros de vigilancia en los límites con entidades vecinas busca inhibir actividades como el narcomenudeo y la delincuencia.
Dijo durante el inicio de construcción del primero de varios arcos de seguridad, ubicado en la carretera Saltillo-Monterrey, muy cerca de la guardarraya entre Coahuila y Nuevo León.
No obstante, la proyección es erigir otros dos, uno en los límites carreteros de Coahuila con Zacatecas y uno más en los límites de Hidalgo, Coahuila, con Nuevo León y Tamaulipas en la carretera Ribereña.
El funcionario explicó que, entre otras, sus características van ligadas al sistema de videovigilancia, ya que ayudará a sistematizar aspectos que se pueden hacer con inteligencia y no necesariamente se tengan que hacer manuales, como la detección de rostros, matrículas o vehículos robados.
Citó que, por ejemplo, en el punto carretero entre Nuevo León y Ramos Arizpe donde el flujo vehicular está calculado en más de 150 mil vehículos diariamente, el arco de seguridad será útil como espacio para los policías tanto de protección, como de atención y de cuidado.
Además de la atención ciudadana será como un punto estratégico con salidas y vecindad con Nuevo León.
Recordó incluso que este punto ya ha realizado detenciones y atenciones importantes relativas a la seguridad de la población.
Todos son iguales, difieren en su anchura, pues el de Ramos Arizpe y el de Saltillo al sur tienen 25 metros de ancho, mientras que el de Hidalgo es un poco más angosto, 12 metros aproximadamente.
Afirmó al final que estos arcos y las inversiones en capacitación, equipamiento y armamento que hace el Gobierno son porque en seguridad no se puede bajar la guardia.