Martínez le clavó un hat-trick al San Lorenzo.
Su nombre de pila es Adrián, sin embargo, en el futbol argentino ya todos lo conocen por el sobrenombre que se ganó: Maravilla Martínez. Y es que el apodo va más allá de su talento en las canchas: su historia de superación es la que lo marcó para convertirse en una sensación.
El Maravilla Martínez llegó a Racing Club en el actual mercado de pases por una cifra cercana a los dos millones de dólares. Su trabajo en Instituto de Córdoba, donde marcó 18 goles en 41 partidos, lo convirtieron en uno de los objetos de deseo de la liga argentina.
Es más, ese talento ya quedó de manifiesto el pasado viernes, cuando Martínez le clavó un hat-trick al San Lorenzo.
Maravilla Martínez estuvo en la cárcel
La historia del atacante está bastante distante de ser la de un “pibe” que tuvo todas las comodidades para lograr el suelo de ser futbolista. Es más, no se formó en las inferiores de ningún equipo.
Lo que sí solía hacer era trabajar como recolector de basura y al mismo tiempo como albañil, así podía ayudar a su familia.