Nacho Fernández regresó a la dinámica de grupo en el entrenamiento del domingo del Real Madrid, a dos días de su regreso a la Liga de Campeones con el duelo de octavos de final en Alemania ante el Leipzig, aliviando en parte los problemas defensivos de Carlo Ancelotti, que recibió la mala noticia de la lesión de Jude Bellingham.
El técnico italiano del Real Madrid tendrá, al menos, uno de sus cuatro centrales en condiciones de jugar en Alemania. Nacho se ha recuperado de la sobracarga muscular que le obligó a parar la pasada semana, tras la disputa del derbi madrileño y le impidió jugar ante el Girona.
Con el alemán Antonio Rüdiger, dos semanas de baja tras perderse ya dos encuentros de LaLiga, por una lesión muscular en el vasto lateral del muslo izquierdo, y las bajas de larga duración por lesiones de rodilla del brasileño Èder Militao y el austriaco David Alaba, la recuperación de Nacho es vital para el Real Madrid.
El capitán trabajó al mismo ritmo que sus compañeros, se ejercitó con balón y participó sin problema de los partidos en reducidas dimensiones que fueron la parte principal de la sesión dominical.
Apenas fueron Nacho, Fran García, Luka Modric, Arda Güler, Brahim Díaz y Joselu Mato más Kepa Arrizabalaga en la portería, los jugadores del primer equipo que trabajaron sobre el césped junto a un grupo de canteranos. Los titulares que golearon al Girona para dar un golpe a LaLiga, se quedaron en el interior de las instalaciones de la ciudad deportiva madridista en una jornada de recuperación.
Ancelotti juntará a todos sus jugadores disponibles en el único entrenamiento que tendrá para preparar el duelo ante el Leipzig. Será ya en Alemania, en el TB Arena desde las 19:00 horas del lunes. Tiene como bajas confirmadas a Thibaut Courtois, Militao, Alaba, Rüdiger y Bellingham.