A pesar de las afirmaciones de Microsoft en los juicios del año pasado, donde aseguraba que Activision Blizzard operaría de forma independiente, los recientes despidos parecen contradecir esta promesa, según indica la FTC. Desde que Microsoft anunció una considerable reducción de personal en Xbox, resultando en la salida de 1.900 empleados, han surgido críticas continuas por parte de senadores y comisionados de la FTC, quienes cuestionan la naturaleza de la operación.
Esta no es la primera vez que la FTC intenta bloquear la adquisición de Microsoft sobre Activision Blizzard después de la fusión. En esta ocasión, la Comisión Federal de Comercio ha presentado una denuncia que sugiere que los despidos recientes "contradicen" las afirmaciones previas de Microsoft. Según el regulador, Microsoft había asegurado en los juicios anteriores que Activision Blizzard mantendría su autonomía en la toma de decisiones.
"El reciente plan de Microsoft de eliminar 1.900 puestos de trabajo en su división de videojuegos, incluyendo la unidad recién adquirida de Activision, contradice las declaraciones previas realizadas ante este tribunal", señala el regulador. Sin embargo, Microsoft ha explicado que estos despidos se enfocan en roles duplicados. La FTC argumenta que esta explicación es "incoherente" con la idea de que las dos empresas operarían de forma independiente tras la fusión.
A pesar de estos cuestionamientos, Microsoft está experimentando un período de gran éxito financiero, alcanzando una capitalización de mercado de 3 billones de dólares y alcanzando máximos históricos en el valor de sus acciones. Sin embargo, estas noticias llegan en medio de los despidos en Xbox y de especulaciones sobre la posibilidad de que Xbox lance exclusivas también en PS5 y Switch. A pesar de ello, la salud financiera de la división de juegos parece sólida, como lo demuestran los ingresos récord de Xbox gracias a la adquisición de Activision Blizzard.