La avena es un cereal conocido especialmente por sus grandes beneficios para la salud humana, el cual actúa de mejor manera una vez que se combina con frutas de bajo índice glucémico, como la manzana verde.
De hecho, combinar la avena con la fruta no sólo se trata de una alimento delicioso, sino que también da una diversidad de nutrientes que contribuyen al bienestar general del organismo.
Entre los beneficios de la avena además de ser rica en fibra soluble es que tiene vitamina E, vitamina B5 y B6, además de minerales como hierro, magnesio, selenio y también cobre
Pero eso no es todo, sino que también aporta al organismo aminoácidos esenciales, y la fibra soluble de la avena desempeña un papel muy importante en la estabilidad de los niveles de glucosa y colesterol en la sangre.
Por su parte, la manzana es rica en vitaminas A, B1, B2, B5, B, vitaminas E y C, aunado a minerales como boro, calcio y potasio. Además, la fibra presente en la cáscara de la manzana se suma a sus beneficios nutricionales, permitiendo una digestión saludable.
Cabe destacar que combinar la avena con la manzana es eficaz para mantener estables los niveles de glucosa en la sangre y los componentes solubles presentes en los dos alimentos logran contribuir a una liberación más lenta de insulina, previniendo así los picos de glucosa, ayudando a prevenir la diabetes.
Asimismo, el beta-glucano, un compuesto que se encuentra en la avena, puede favorecer la reducción del colesterol LDL, al que también se le conoce como “malo”. Esta acción combinada de la manzana y avena contribuye a la salud cardiovascular, permitiendo prevenir problemas como infartos.
Consumir avena con manzana de forma regular aporta antioxidantes y fitoquímicos, que son esenciales para prevenir el desarrollo de células cancerígenas y neutralizar la acción de los radicales libres en la piel.
Recuerda que al preparar la avena con la manzana puedes añadir yogurt griego o natural e incorporar hojuelas de avena cruda.