Los efectivos tienen la misión de colaborar con las autoridades locales para revertir los índices delictivos, así como preservar y garantizar la libertad, el orden y la paz pública.
Con la finalidad de reforzar el despliegue operativo que se mantiene para inhibir las actividades de la delincuencia organizada, el lunes pasado, 300 agentes y militares integrantes de la “Fuerza de Tarea Oriente” arribaron a los municipios de Tuxpan, Poza Rica y Tihuatlán, Veracruz.
Los efectivos tienen la misión de colaborar con las autoridades locales para revertir los índices delictivos, así como preservar y garantizar la libertad, el orden y la paz pública, para que la población realice sus actividades habituales con normalidad.
De acuerdo a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), los uniformados también realizan tareas de disuasión, prevención, patrullajes, reconocimientos y estableciendo puestos militares de seguridad.
El sábado pasado 250 efectivos arribaron a Baja California, también para inhibir las actividades de la delincuencia organizada.
El viernes 5 de enero arribaron 600 militares, integrado por 100 uniformados de las Fuerzas Especiales y 500 de la Fuerza de Tarea Regional, los primeros llegaron vía aérea al Aeropuerto Internacional “Carlos Rovirosa Pérez” de Villahermosa, Tabasco, en una aeronave B-737 de la Guardia Nacional.
Mientras que los segundos se trasladaron vía terrestre procedentes de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.
Las tropas reforzarán el despliegue operativo que mantienen en esa entidad y se sumarán a los esfuerzos que realizan las autoridades locales en tareas de seguridad pública.