El exfuncionario mexicano acusado de abuso sexual aseguró que seguirá su proceso en prisión domiciliaria.
El escritor mexicano Andrés Roemer salió este martes de una cárcel en Israel, donde se encontraba cumpliendo una sentencia por abuso sexual.
De acuerdo con una carta de Roemer, difundida a través de la red social X, antes Twitter, el mexicano aseguró que seguirá su proceso en prisión domiciliaria.
"En contra de las estadísticas más robustas, salí de la cárcel. Parece ser el primer caso de arresto domiciliario en mi circunstancia", se lee en el tuit de la cuenta manejada por la familia del exdiplomático.
¿Qué sabemos del caso Roemer, acusado de abuso sexual?
El exconductor de televisión y funcionario público huyó a Israel en 2021, tras ser acusado por acoso, abuso y violación sexual realizadas por decenas de mujeres.
No obstante, pese a que el exembajador de la Unesco rechazará haber huido de México tras dichas acusaciones, fue hasta el 2 de octubre del 2023 que fue detenido por la policía israelí.
Desde 2021, México presentó a Israel un total de cinco solicitudes de extradición formales contra Roemer, acusado de abuso sexual agravado y violación.
Esto después de que en febrero de 2021, más de una decena de mujeres rompieron su silencio al acusar al escritor de abusos sexuales y comportamientos inapropiados, mientras que la agrupación Periodistas Unidas Mexicanas (PUM) recopiló más de 60 denuncias.
Pese a que, México envió una carta a las autoridades israelíes solicitando directamente su cooperación, el gobierno israelí aclaró que su extradición “se trata de un proceso legal largo y complejo, y aún no se sabe cuánto durará”.
En 2022, la Interpol emitió también una ficha roja para buscar y detener al diplomático, acusado de citar a sus presuntas víctimas en su casa con excusas laborales para después realizar tocamientos e insinuaciones y, finalmente, ofrecerles dinero.
Roemer, reconocido por autoridades israelíes y grupos judíos
Roemer fue embajador de México ante la UNESCO y en 2016 fue destituido de su cargo tras no seguir la postura de su país y abstenerse en una resolución presentada por países árabes sobre la Explanada de las Mezquitas (Monte del Templo para los judíos), situada en Jerusalén Este ocupado.
Israel criticó la resolución y alegó que negaba todo vínculo entre el recinto (el tercer lugar más sagrado del islam y el primero para el judaísmo) y el judaísmo, al limitarse el texto a considerar la mezquita de Al Aqsa como un lugar de culto musulmán.
Ante ello, la posición tomada por Roemer fue alabada por las autoridades israelíes e instituciones judías de todo el mundo.
Recibió también el reconocimiento del actual primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y de la ciudad israelí de Ramat Gan, que incluso nombró una calle con su nombre.
A su vez, fue reconocido por grupos judíos de envergadura mundial como el Centro Simón Wiesenthal.