El Ejército calificó la operación como una de las más importantes "en los últimos tiempos"
Cerca de 10 toneladas de droga fueron incautadas en el oeste de Ecuador, país que libra una guerra contra el narco con militares en las calles, informó este domingo el Ejército, que calificó la operación como una de las más importantes "en los últimos tiempos".
La droga, cuya cantidad exacta aún está determinándose, fue hallada en una bodega ubicada en una zona rural de la ciudad de Vinces, en la provincia de Los Ríos (oeste), precisaron las fuerzas armadas a través de la red social X.
Pasadas las 17:00 locales, militares y policías continuaban "en la labor de verificación, seguridad perimetral" y el acordonamiento del área, añadió la autoridad castrense.
Según un video compartido por el ejército, la droga estaba almacenada en bolsas y grandes sacos que estaban apilados en una bodega. Algunos de ellos llevan lo que se presume que son los logos de grupos criminales.
Una veintena de organizaciones siembran el terror en el país e imponen su poder desde las cárceles, en represalia por las políticas de mano firme del gobierno para enfrentar la arremetida del narcotráfico.
El presidente Daniel Noboa declaró el 9 de enero un "conflicto armado interno" y ordenó una lucha sin tregua contra las bandas narco, a las que calificó de "terroristas".
El sábado pasado, las fuerzas armadas del país sudamericano anunciaron la incautación de un semisumergible que trasladaba casi tres toneladas de cocaína por aguas del Pacífico.
En 2023, las autoridades ecuatorianas decomisaron más de 200 toneladas de droga, una cifra que desde 2019 lleva marcando récords.
Ubicado entre Colombia y Perú, los mayores productores mundiales de cocaína, Ecuador logró por décadas estar exento de la violencia del narcotráfico, pero las bandas transformaron lo que era apenas un territorio de paso y almacenamiento de cocaína en un centro de operaciones y logística para el envío de cocaína, principalmente Europa.
Ecuador pasó de registrar en 2018 una tasa de 6 homicidios por cada 100 mil habitantes a 46 en 2023, una cifra inédita que ubica a la nación andina entre las más violentas de la región.