Luis Rey García Villagrán, quien acompaña al contingente, rechazó los dichos de Jesús Romero López, secretario de Gobierno, quien aseguró que los extranjeros estaban agradecidos por el acompañamiento
Juchitán. - El coordinador del Centro por la Dignificación Humana, Luis Rey García Villagrán, quien acompaña a la caravana migrante “Éxodo de la Pobreza”, rechazó de manera tajante los dichos vertidos hoy por el secretario de gobierno de Oaxaca, Jesús Romero López, quien durante la conferencia de prensa del Gabinete de Seguridad aseguró que los extranjeros están “agradecidos” con el gobierno oaxaqueño por el “acompañamiento que han brindado” y que la prensa busca confrontarlos con las autoridades estatales.
Tras esas declaraciones, García Villagrán aseguró que los migrantes no tienen nada que agradecer, que la gente está sufriendo mucho y está padeciendo. “Hay muchas enfermedades, ayer fue una noche terrorífica, durmieron en bolsas de plástico y cajas de cartón. No hay ayuda de nadie, sólo el presidente municipal de Santo Domingo Ingenio, Germaín Alvarado López, brindó atención médica en lo que pudo, y trajo unas pipas de agua. Del gobierno del estado sólo hemos recibido la palabra hostilidad.¿De qué podemos estar agradecidos del gobierno? De nada”.
Luis Rey García Villagrán agregó que los migrantes con quien están agradecidos es con “el pueblo de Oaxaca”, con los ciudadanos que los han apoyado con agua y comida, y aseguró que es a ellos a quienes les desean bendiciones, incluyendo a quienes les han negado la ayuda humanitaria.
“No tenemos nada de que estar agradecidos con los funcionarios de Oaxaca, nos han impedido entrar a los municipios de Zanatepec y Niltepec, eso es una realidad. Es falso que hayamos expresado ese agradecimiento. Como dicen en Guatemala, estos políticos son una basura”, externó en tono molesto.
El dirigente de la caravana, conformada por alrededor de mil 500 migrantes, también negó que hayan asegurado que la prensa busca confrontarlos con las autoridades, por el contrario, dijo.
“Sin el apoyo de la prensa, estaríamos muertos, la prensa ha difundido nuestras peticiones al gobierno de México”, añadió.
Anoche y la madrugada de hoy, explicó, los migrantes pasaron una noche “terrorífica”, por los fuertes vientos y las bajas temperatura. Algunos tuvieron que meterse en bolsas de plástico o cajas de cartón para protegerse del frío. A pesar de que todos estaban amontonados bajo el domo para darse calor, la noche fue terrible, indicó.
Pese a esas condiciones climatológicas, grupos de migrantes que venían atrás de la caravana siguieron caminando sobre el tramo La Venta-La Ventosa, donde el fuerte viento volcó este miércoles un tráiler que transportaba tinacos para almacenar agua. Zigzagueando, los migrantes enchamarrados desafiaban la fuerza de los vientos con rachas de hasta 110 kilómetros por hora.
“¿De qué podríamos estar agradecidos de un gobierno que nos calificó como “hostiles”? Estamos agradecidos con el pueblo de Oaxaca, con la prensa, pero no podemos agradecer a quienes nos niegan la ayuda humanitaria”.
Ante el pronóstico de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), de que se mantendrán las bajas temperaturas y fuertes vientos, por la mañana de hoy elementos del Grupo Beta del Instituto Nacional de Migración (INM) regalaron unas 500 sábanas térmicas y, como todos los días desde que ingresó la caravana al territorio oaxaqueño, también entregó 300 paquetes de atunes, galletas y agua.
De igual forma, y ante la ausencia de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), que sólo atendieron un día en Tapanatepec, el Grupo Beta envió una ambulancia y personal médico para ofrecer sus servicios, sobre todo a los niños y niñas que se resfriaron en las últimas horas al estar expuestos a los fuertes vientos y a las bajas temperaturas.