Los puentes permanecieron cerrados hasta cerca de las 13:00 horas de la tarde, momento en el cual el personal de Bomberos y Protección Civil desplegó una estrategia efectiva.
La llegada del frente frío número 27 a Monclova no solo trajo consigo temperaturas gélidas, sino también caos en las principales vialidades, dejando a su paso una estela de accidentes viales que pusieron a prueba la capacidad de respuesta de las autoridades locales. Además, provocó el ausentismo total escolar en sus diferentes niveles.
A pesar de las advertencias y pronósticos con anticipación precisos sobre la llegada de la helada, hubo descuidos y omisiones, así como conductores que desafiaron las recomendaciones de velocidad y se vieron involucrados en múltiples colisiones.
El primer incidente, una cadena de choques que involucró a siete vehículos, tuvo lugar en el paso superior del puente vehicular del libramiento Carlos Salinas de Gortari. Pocos minutos después, una segunda carambola de cuatro vehículos se registró sobre el puente de AHMSA, seguida de una tercera en el puente del cordón industrial del libramiento Carlos Salinas de Gortari y avenida Industrial.
Ante esta situación, las autoridades municipales tomaron medidas inmediatas para salvaguardar la seguridad de los ciudadanos. Varios puentes, incluyendo el de Asturias, el del Seguro Social, el de calle Zaragoza, el de la avenida Sidermex, el de la avenida 4, el de Industrial y el de la Obrera, fueron cerrados como medida preventiva.
Acciones. La decisión, aunque generó inconvenientes en la movilidad, fue considerada esencial para prevenir accidentes adicionales debido al congelamiento del pavimento.
Los puentes permanecieron cerrados hasta cerca de las 13:00 horas de la tarde, momento en el cual el personal de Bomberos y Protección Civil desplegó una estrategia efectiva para combatir los estragos del hielo en las vías. La aplicación de sal en el pavimento se convirtió en una herramienta clave para evitar la formación de más hielo y garantizar una rápida reapertura de las vialidades. Julio Ríos, director de Protección Civil, explicó la importancia de rociar sal en el pavimento en condiciones de bajas temperaturas. La sal, al entrar en contacto con el hielo, reduce su punto de congelación, permitiendo que el agua se mantenga en estado líquido a temperaturas más bajas. “Este método, conocido como efecto higroscópico, no solo derrite el hielo presente, sino que también previene la formación de nuevas capas de hielo, proporcionando un ambiente más seguro para conductores y peatones”, dijo Julio Ríos. Además de los problemas viales, la onda gélida afectó tuberías, ventanas de casas y negocios, así como vehículos que quedaron congelados en su lugar. Ríos recomendó la aplicación de alcohol o sal en los vidrios congelados, desaconsejando el uso de agua caliente para evitar que las ventanas se reventaran.
En medio de los desafíos, la solidaridad también emergió. El personal de Protección Civil brindó apoyo y albergue a 12 personas en situación de calle, destacando la importancia de la colaboración comunitaria en momentos de adversidad. Para finalizar, Julio Ríos señaló que Monclova, está enfrentando los estragos del frente frío número 2 y se demuestra una vez más la importancia de la precaución y la colaboración comunitaria en situaciones climáticas extremas.
Como se recordará, el primero de enero del 2018 se registró una de las peores heladas en Monclova, que congeló los puentes y al no cerrarse a tiempo se registraron varias carambolas simultáneas en las que participaron alrededor de 45 vehículos, los accidentes viales en cadena iniciaron en el puente del Seguro Social y terminaron en el puente de la Sidermex. Ante dicho caos vial, las autoridades implementaron nuevas medidas como el cierre de los pasos superiores y dar a conocer con anticipación las heladas, reduciendo así el peligro para la ciudadanía.