Las lágrimas volvían brillantes los ojos de Federico de Dinamarca (55 años) al salir al balcón del palacio de Christianborg en el día de su proclamación como rey del país. Día imborrable en el que, evidentemente, estuvo acompañado por sus allegados. Su madre, que le cedía el trono, su hijo Christian, ahora primero en la línea de sucesión, y por supuesto su esposa Mary Donaldson.
¿Cuál ha sido la primera reacción de Genoveva Casanova a la coronación de Federico?
La exconcursante de 'MasterChef Celebrity' ha permanecido callada desde que las fotografías salieran a la luz. Pese a todo, quitarse el foco mediático de encima en una situación como esta es bien complejo. Y no lo ha conseguido. La expectativa por una posible respuesta, su paradero actual o por saber si Federico X se ha puesto en contacto con ella —o viceversa— han copado titulares a diario, así como incontables horas de tertulia rosa en la televisión. A pesar de que la esperanza por una reacción en claro ha decaído progresivamente, el anuncio de la abdicación de la reina Margarita II la ha vuelto a situar como sujeto indispensable para no perder detalle de la actualidad imperante. ¿Qué piensa ella de que su amigo, al que hemos visto entrar y salir de su apartamento en la capital, ya haya sido proclamado jefe de Estado? Por desgracia, el momento de conocerlo todavía no ha llegado.
No obstante, Genoveva ha querido hacer partícipes a sus más de 70.000 seguidores de Instagram de una importante reflexión en el día inmediatamente consecutivo al gran evento. Mediante la republicación de un vídeo corto en formato 'reels', la intérprete comparte un clip cinematográfico que contiene un contundente monólogo. Palabras sobre la importancia de ser una mujer ambiciosa, con una autoestima férrea, capaz de hacer frente a cualquier adversidad, que en la traducción del inglés dicen así: "Quiero una gran vida. Quiero experimentarlo todo. Quiero romper todas las reglas que existen. Dicen que la ambición tal vez sea un rasgo poco atractivo en una mujer, ¿pero sabes qué es realmente poco atractivo? Esperar a que pase algo. Mirar por la ventana pensando que la vida que deberías vivir está ahí fuera, en alguna parte. No estar dispuesto a abrir la puerta e ir a buscarlo, incluso si alguien te dice que no puedes".