Un propulsor de primera etapa del Falcon 9 se rompió después de completar su decimonovena misión y se volcó en el dron flotante en el Océano Atlántico debido a vientos fuertes.
El cohete SpaceX se lanzó el sábado 23 de diciembre desde la Estación Espacial de Cabo Cañaveral, mientras transportaba 23 satélites Starlink a órbita. Después del aterrizaje En el drone de la compañía, el cohete propulsor, conocido por su número de serie B1058, estaba siendo transportado de regreso a la costa cuando se volcó debido a a fuertes vientos y olas, SpaceX reveló Martes en X (anteriormente Twitter).
“Súper decepcionante y triste perder el booster 1058», Kiko Dontchev, vicepresidente de lanzamiento de SpaceX, escribió en X en reacción a la noticia. “Los impulsores de Tippy ocurren cuando obtienes un cierto conjunto de condiciones de aterrizaje que conducen a las piernas tener una carga desigual. El viento fuerte o el estado del mar hacen que el propulsor se tambalee y se deslice, lo que puede llevar a una carga aún peor en las piernas. ”
Es un final desafortunado para el amado B1058, el primer propulsor Falcon 9 para transportar astronautas a la Estación Espacial Internacional. El 30 de mayo, En 2020, la primera etapa de refuerzo lanzó a los astronautas de la NASA Doug Hurley y Bob Behnken a bordo de una nave espacial Crew Dragon para la primera misión tripulada de SpaceX. Una hazaña histórica también marcó el primer vuelo tripulado del Programa de Tripulación Comercial de la NASA y el primer lanzamiento de astronautas desde suelo estadounidense desde el El programa del transbordador espacial finalizó en 2011.
Desde entonces, el propulsor entregó 860 satélites en órbita a través de 19 misiones, un récord. “Los propulsores Falcon más nuevos han mejorado sus patas de aterrizaje con el capacidad para autonivelarse y mitigar este tipo de problema”, escribió SpaceX en X.
Sin embargo, la compañía no va a descartar los pedazos rotos de su icónico cohete propulsor. “Estamos planeando rescatar los motores y realizar inspecciones de líder de vida en el hardware restante”, Jon Edwards, vicepresidente de vehículos de lanzamiento Falcon de SpaceX, escribió en X. “Todavía hay bastante valor en este refuerzo. No permitiremos que se desperdicie .