Según un estudio francés publicado en la revista Journal of the European Academy of Dermatology and Venereology, las personas con obesidad que se someten a cirugía bariátrica tienen menos probabilidades de sufrir una hidrosadenitis supurativa que requiera hospitalización.
La cirugía también se asoció con un menor riesgo entre quienes ya padecían la enfermedad, pero la reducción no fue significativa.
Los investigadores señalan que "con su conocido efecto en la reducción de la resistencia a la insulina y el tejido adiposo con su desencadenante de inflamación asociada, y con los cambios en la dieta asociados a la cirugía metabólica, los pacientes sometidos a cirugía bariátrica deberían tener un riesgo inferior de desarrollar hidrosadenitis supurativa de nueva aparición o recidivante. Se necesitan estudios prospectivos de casos y controles centrados en la pérdida de peso, las deficiencias de vitaminas y micronutrientes y la incidencia de formas leves de hidrosadenitis supurativa, que no requieren ingreso hospitalario, para confirmar el efecto protector de la cirugía bariátrica".
Los investigadores utilizaron datos administrativos de toda Francia para realizar un estudio de casos y controles de 10 años de duración entre pacientes con un índice de masa corporal de 30 kg/m2 o más.
Se realizó un primer análisis entre pacientes que no sufrían hidrosadenitis supurativa, comparando el riesgo de hospitalización por enfermedad grave entre 297.776 que se sometieron a cirugía bariátrica y 2.735.930 que no.
Se realizó un segundo análisis entre pacientes que presentaban hidrosadenitis supurativa, comparando el riesgo de hospitalización por enfermedad grave entre 310 que se sometieron a cirugía bariátrica y 3.875 que no
Entre los pacientes que no presentaban hidrosadenitis supurativa, el 0,08 % de los que se sometieron a cirugía bariátrica tuvieron una hospitalización posterior por hidrosadenitis supurativa grave, en comparación con el 0,11 % de los que no se sometieron a esta cirugía. La diferencia correspondió a una reducción significativa del 26 % en el riesgo con la cirugía (p < 0,0001).
Entre los pacientes que ya sufrían hidrosadenitis supurativa, la tasa de hospitalización por enfermedad grave fue de 3,5 por 100 pacientes-año en el grupo que se sometió a cirugía bariátrica, en comparación con 5,4 por 100 pacientes-año en el grupo que no se sometió a esta cirugía. La diferencia correspondió a una reducción no significativa del 32 % en el riesgo con la cirugía (p = 0,18).