El festejo por el 30 aniversario zapatista en el municipio de Ocosingo reunió a bases de apoyo, a organizaciones y colectivos de México y de 20 países, principalmente de Europa.
La base de la nueva etapa del zapatismo, será la no propiedad de la tierra; es decir, el establecimiento de extensiones de "tierra recuperada como del común” en las que no existan comisariados, ni agentes, ni empresas, ni autoridades ejidales, ni estatales. "Tierra común. Tierra de nadie", anunció el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) al conmemorar los 30 años de su irrupción armada en Chiapas.
"Moisés" dijo que son "dos cosas lo que está aquí, la propiedad debe de ser del pueblo y común y el pueblo se tiene que gobernar en si mismo”.
El festejo por el 30 aniversario zapatista en el municipio de Ocosingo reunió a bases de apoyo, a organizaciones y colectivos de México y de 20 países, principalmente de Europa.
"Moisés", rodeado de la comandancia general zapatista y del capitán "Marcos", afirmó que no se puede humanizar el capitalismo.
“No va a decir el capitalismo: me rindo de explotar. Lo que se necesita es pensar en cómo cambiar esto y nadie nos va a decir, somos nosotros mujeres y hombres, y por eso nosotros vamos a seguir ese camino y nos vamos a defender, vamos a seguir, vamos a demostrar”.
Lo que quiere decir, señaló , que "no necesitamos matar a los soldados y a los malos gobiernos, pero si vienen, nos vamos a defender”.
Próximo a la media noche, los zapatistas realizaron el pronunciamiento conmemorativo por sus 30 años del levantamiento armado "contra el olvido, contra la muerte y la destrucción”.
Integrantes de una nueva generación de milicianos, hombres y mujeres, formaron columnas y desfilaron en la explanada del caracol asentado en una de las siete cañadas de Ocosingo,en la selva de Chiapas, uno de los municipios emblemáticos en los que el EZ surgió la madrugada del 1 de enero de 1994.
Los zapatistas colocaron en el templete principal sillas con referencias a los desaparecidos, las víctimas de feminicidios e infanticidios; los presos políticos y los jóvenes reclutados por el crimen organizado. Además, de los jóvenes asesinados; es decir, "los ausentes” del país, se destacó.
Al poblado Dolores Hidalgo,en Ocosingo, acudieron la organización “Pueblos Unidos” que defiende el agua de la región de Los Volcanes, en Puebla; representantes mayas que rechazan los megaproyectos, como el tren de la región.
Fueron también purépechas de Cherán; otomíes del Estado de México, y otros pueblos organizados en el Congreso Nacional Indígena, que estuvieron con sindicalistas franceses, estadounidenses y españoles, así como activistas alemanas, representantes de Bélgica, Grecia, Corea, Finlandia y de América Latina.
"Moisés" manifestó que los zapatistas no buscan que se les erija un museo. No necesitamos que nos vengan a dar un taller político de cómo está el sistema. "Se ve como está el sistema capitalista. Quienes no quieren ver?, será su responsabilidad".
El jefe rebelde aseguró que hace 30 años el EZLN demostró que el pueblo es el que "tiene que saber gobernarse", para ese fin se requiere organización; "hacer en los hechos, organicémonos en cada geografía y cada quien en su calendario, porque nadie va luchar en donde viven”.
La celebración por las tres décadas de la irrupción zapatista inició el 30 de diciembre y continúan durante la mañana y tarde del primero de enero.
En estos festejos han sido protagonistas las nuevas generaciones de mujeres y hombres con actividades culturales,obras de teatro y bailes.
En las jornadas repudiaron los denominados megaproyectos: como el Tren Maya, el tren transísmico , la refinería Dos Bocas y otros.