Ha pasado un mes desde el cierre del puente internacional número uno, una medida tomada debido al aumento en el cruce de migrantes. Según las autoridades, es crucial que esta tendencia disminuya para que la operación pueda regresar a la normalidad; de lo contrario, se mantendrá la restricción, afectando significativamente la economía en ambos lados de la frontera, especialmente en el mejor mes del año para las ventas.
Capacidad. Se reabrieron tres casetas y el carril SENTRI en el puente dos. Iván Morua, gerente interino de la ciudad de Eagle Pass, recordó que el puente dos operaba con una sola caseta, pero se reabrieron dos más, incluido el carril SENTRI, principalmente debido a la disminución en los procesos ilegales. Se espera que esta tendencia continúe para que todas las distintas operaciones internacionales realizadas a través de estas vías vuelvan a la normalidad. Según las autoridades migratorias, el centro de procesamiento de la Patrulla Fronteriza tiene capacidad para albergar a 2 mil personas, pero en días pasados estaba rebasado con 4 mil buscando asilo político. Las autoridades locales han expresado la falta de interés del gobierno federal en poner fin a esta situación, ya que no hay consecuencias para quienes violan la ley cruzando la frontera ilegalmente.
Sin embargo, estas acciones generan numerosas repercusiones, especialmente en las economías de las comunidades fronterizas.
Esta situación parece no tener fin, a pesar de los esfuerzos de las instancias locales para apoyar en este tema, con la policía y los bomberos brindando atención, además de las demandas de la comunidad legalmente establecida que paga impuestos y reclama una orientación adecuada.
Un ejemplo de esta situación es la saturación del hospital debido al aumento de migrantes.