Luego de una actuación que lo aleja del JMV de la temporada, el mariscal de 49ers se sacude el mal juego vs Ravens para enfrentar a Washington.
Brock Purdy no ha tenido que lidiar con muchas salidas complicadas en su breve carrera en la NFL.
Eso fue lo que hizo que su actuación de cuatro intercepciones en el Monday Night Football contra los Baltimore Ravens resultara inusual, al no lograr un balance correcto en las decisiones de cuándo arriesgarse y cuándo proteger el balón.
“Fue simplemente no tener la mentalidad correcta como QB, teniendo que ser agresivo para lanzar, para hacer una gran jugada, pero también, a la hora de lanzar, no quieres entregar el balón. Ese es el aprendizaje, volver atrás y decir que cada jugada tiene vida propia”, reflexionó el jueves.