No hay experiencia más reconfortante que sumergirse en una película que evoca recuerdos entrañables. En Netflix, reposan muchas de las magníficas obras de Studio Ghibli. Las creaciones de Hayao Miyazaki han conquistado corazones en todo el mundo y, a pesar del paso del tiempo, sus películas continúan siendo las preferidas del público.
Repletas de valientes protagonistas, criaturas extraordinarias y escenas llenas de delicias culinarias, las películas de Studio Ghibli son un regalo para esos momentos de relax. Si el día no reserva planes especiales ni cenas en tu agenda, entonces sumergirte en esta joya de Studio Ghibli será el plan perfecto antes de dormir.
Estamos hablando de "Susurros del corazón", una de las películas más pasadas por alto del estudio que está disponible para todos los suscriptores de Netflix. Es la única producción de un cineasta que nos dejó a la temprana edad de 47 años, y representa una pieza fundamental para los amantes de las narrativas de este estudio.
Bajo la dirección de Yoshifumi Kondô, esta obra animada japonesa relata la historia de Shizuku Tsukishima, una adolescente apasionada por la lectura que, al término del año escolar, se propone un plan para sus vacaciones de verano: leer todos los libros de la biblioteca que pueda y traducir canciones extranjeras. Una noche, mientras hojea uno de los libros, descubre el nombre de un chico en las tarjetas de préstamo: Seiji Amasawa. Aunque inicialmente siente curiosidad, Shizuku no indaga más sobre el tema hasta que, persiguiendo a un encantador gato, llega a una tienda de antigüedades donde Seiji trabaja como aprendiz de fabricante de violines.
A medida que estos dos adolescentes, que ya se conocían pero no tenían una buena relación, pasan tiempo juntos, descubren que comparten intereses similares y una sensibilidad por el arte que les lleva a perseguir sus sueños. Una cálida y mágica historia que no te puedes perder.