La caída del cabello, denominada como alopecia, que puede ser temporal o permanente, afecta al cuero cabelludo o al cuerpo entero y tiene diversas causas, como factores genéticos, cambios hormonales, condiciones médicas o envejecimiento, de acuerdo con los especialistas de Mayo Clinic. Aunque más frecuente en hombres, también ocurre en las mujeres
Existen distintos enfoques respecto al manejo de la calvicie, desde aceptarla hasta utilizar peinados, accesorios o tratamientos para disimularla o intentar revertirla. Aunque, algunos optan por suplementarse algunas vitaminas o nutrientes como medida de prevención.
¿Cuáles son las causas de la caída de cabello?
De acuerdo con Mayo Clinic, la pérdida del cabello puede estar ligada a diversos factores, como la herencia genética que conduce a la alopecia androgénica, patrones de calvicie en hombres y adelgazamiento en mujeres
Las fluctuaciones hormonales, afecciones como trastornos de la tiroides, el embarazo y enfermedades del cuero cabelludo también pueden desencadenar pérdida o disminución del cabello.
Los efectos secundarios de medicamentos para tratar enfermedades como el cáncer y la artritis pueden incluir la caída del cabello, al igual que los tratamientos con radioterapia.
Además, prácticas como peinados muy ajustados o tratamientos agresivos pueden originar alopecia por tracción y, si se producen cicatrices, la pérdida capilar se vuelve irreversible.
¿Cuándo preocuparse por la caída del cabello?
Es importante que una persona se comunique con su profesional de la salud si experimenta caída del cabello inusual, rápida o prematura. También, si aparece acompañada de síntomas como dolor, picazón o cambios en la apariencia de la piel del cuero cabelludo, según recomendaciones de MedlinePlus que es un servicio de información en línea provisto de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
El sitio oficial menciona que las mujeres particularmente deben estar atentas si enfrentan calvicie similar a la masculina. Además, otros signos de alarma incluyen calvas en la barba o cejas, variaciones en el peso, debilidad, sensibilidad al frío, cansancio excesivo o signos de posible infección en el área afectada.
¿Qué vitaminas y nutrientes ayudan a evitar la caída del cabello?
1. Vitamina B12
Un estudio en la India publicado en Journal of Dermatology and Dermatologic Surgery encontró que existe una deficiencia de vitamina B12 en personas con efluvio telógeno crónico, que es una forma de pérdida de cabello.
Sin embargo, los autores señalaron que otros estudios no han encontrado una conexión clara entre los niveles de B12 y esta condición. Debido a estas diferencias en los hallazgos, los investigadores consideran que seguir profundizando en el estudio de la nutrición y la dieta puede ser clave. Así, determinar y corregir las posibles deficiencias de nutrientes podría convertirse en un método valioso para combatir la pérdida del cabello.
De la misma forma, una revisión de estudios que se publicó en Dermatology and Therapy concluyó que los datos no son suficientes para recomendar la detección y la suplementación de esta vitamina para prevenir la caída del cabello.
2. Biotina
El Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés) indica que, aunque los suplementos de biotina o vitamina B7 son promocionados para fortalecer cabello, piel y uñas, las pruebas científicas que apoyan estas afirmaciones son escasas.
Una revisión de distintos estudios indica que tomar biotina podría ser positivo en casos donde la persona no tiene suficiente de esta vitamina, ya sea por razones hereditarias o por otras causas. Asimismo, podría ayudar en situaciones particulares como cuando las uñas se quiebran fácilmente o el cabello es difícil de manejar.
Sin embargo, los autores especificaron que todavía se necesita más investigación para poder recomendar la biotina de manera generalizada a personas que no presentan una deficiencia de la misma.
Cabe mencionar que la biotina se encuentra en las carnes, el pescado, los huevos, hígado de pollo, batatas, espinacas, brócoli, semillas o nueces.
3. Hierro
La revisión de estudios difundida en Dermatology and Therapy concluye que hay un consenso entre muchos expertos sobre la necesidad de suplementar con hierro a pacientes que presentan niveles bajos de hierro o ferritina y están experimentando pérdida de cabello.
4. Vitamina D
Un análisis de investigaciones publicado en Journal of Cosmetic Dermatology concluyó que la vitamina D juega un papel importante en cómo crecen y se forman los folículos del cabello.
Los autores señalan que muchas investigaciones han encontrado que hay una relación entre los niveles bajos de este nutriente en la sangre y varios tipos de caída del cabello que no dejan cicatrices como calvicie de patrón masculino o femenino.
Además, se menciona que la falta de esta vitamina D también se ha relacionado con la alopecia cicatricial, que es una forma de pérdida de cabello que sí deja cicatrices.
Sin embargo, los investigadores mencionan que todavía no hay pruebas definitivas que aumentar los niveles de vitamina D ayude a detener o a mejorar la caída del cabello, por lo que se necesitan más estudios.
La revisión de estudios publicada en Dermatology and Therapy sugiere que los resultados de las investigaciones indican que es importante tener en cuenta la vitamina D al evaluar y tratar la alopecia areata (un trastorno autoinmune en el que el organismo ataca sus propios folículos pilosos). Sin embargo, se requiere realizar más indagaciones para entender por completo cómo se relacionan este nutriente y esta enfermedad del cabello.