Ante la llegada masiva de migrantes a esta frontera, quienes buscan cruzar de manera ilegal hacia los Estados Unidos, las autoridades locales continúan supervisando de cerca esta situación, a pesar de que no esté directamente dentro de su competencia jurisdiccional.
Dinámica. Santiago de Jesús Espinoza, agente del Ministerio Público, reconoció la labor de dirigir a los migrantes hacia los albergues correspondientes, aunque subrayó que esta acción está dentro de la esfera de competencia del fuero federal. En cuanto al proceso, es importante destacar que, hasta el momento, no se han registrado incidentes delictivos vinculados a los migrantes, a excepción de un caso aislado ocurrido varios meses atrás, donde un migrante fue detenido por posesión de narcóticos. Por otro lado, en una dinámica inversa, llama la atención que los migrantes no hayan acudido a la delegación de la Fiscalía General del Estado para presentar denuncias en caso de haberse visto afectados de alguna manera. Esta situación plantea interrogantes sobre la relación de los migrantes con las instituciones locales y destaca la necesidad de explorar vías para fomentar la confianza y la comunicación entre ambas partes.
Los migrantes, en su búsqueda de seguridad, continúan llegando a esta frontera con la esperanza de encontrar un paso más seguro hacia una nueva vida. La percepción de que esta región ofrece condiciones más seguras se ha convertido en un atractivo fundamental para aquellos que buscan escapar de situaciones difíciles en sus lugares de origen. Sin embargo, este flujo constante de personas en busca de seguridad plantea desafíos significativos tanto para los propios migrantes como para las autoridades locales.