Ante esta situación, es importante ser solidarios con las personas que realmente necesitan ayuda, pero también es importante estar alerta ante posibles fraudes.
Con el inicio de la temporada decembrina, el incremento en el movimiento económico y los aguinaldos que muchos trabajadores reciben, los pedigüeños suelen aumentar en la ciudad, instalándose en los puntos y bulevares más concurridos para recibir propinas y quienes encabezan esta actividad son las famosas “Marías”.
A pocos días de haber iniciado el mes de diciembre, en Monclova se ha podido contemplar una mayor presencia de personas que se dedican a pedir dinero en las calles, sin embargo, como cada año, las personas provenientes de otras ciudades, especialmente del sur del país, visitan la ciudad en esta temporada para poder ejercer su labor como pedigüeños.
Los pedigüeños que provienen de otros estados, en su mayoría son mujeres de la tercera edad, a las cuales, coloquialmente se les denomina como las “Marías” y viajan durante largas horas para llegar a trabajar de esta manera, pues aseguran que, en el Norte, suelen tener una mejor respuesta económica, ya que, los ciudadanos se prestan para apoyarlas.
Sin embargo, hoy en día, no solo ellas ejercen esta labor, pues con la llegada de esta temporada, también los pedigüeños locales se incrementan, pues como ya se había visto anteriormente, algunos exobreros de Altos Hornos de México comenzaron a pedir dinero en las calles, así como infantes que también 'trabajan' de esta manera sin supervisión alguna.
El optar por pedir dinero en las calles se debe a que, en cuanto inician las temporadas navideñas, muchas personas cobran los aguinaldos, reciben algunas prestaciones extras de sus respectivos trabajos formales y se tiene más intención de apoyar a quienes lo necesitan, por lo que, sin duda, esta es una gran alternativa para ellos. Por otra parte, y como ya es evidente, la situación laboral y económica de la ciudad durante este año no ha sido la mejor, pero este no fue impedimento para que las personas provenientes del sur viajaran en espera de tener una buena respuesta económica, sin embargo, ante la crisis causada por la situación de la empresa AHMSA, muchas personas que anteriormente otorgaban apoyos y propinas a los pedigüeños, hoy en día ya no lo hacen, pues se tiene más conciencia por ahorrar y administrar de una mejor manera el dinero.
Comúnmente en diciembre no solo personas en situación de calle o con alguna discapacidad, casi siempre en silla de ruedas o sin alguna extremidad, extienden la mano para pedir “una moneda” o “para un taco”, pues las señoras mayores también ven esto como una gran oportunidad, ya que, muchos transeúntes no se pueden pasar de largo sin darles por lo menos unas monedas, que, aunque no es obligatorio, hay quienes se sienten conmovidos por la situación. Sin embargo, esto puede causar una controversia, pues hay personas que también se dedican a pedir propinas en ciertos puntos concurridos de la entidad, pero esto se trata de artistas urbanos y comerciantes ambulantes, es decir, que ofrecen algo a cambio de dinero, pero, por el contrario, los pedigüeños que no se dedican a la venta o servicio de algo específicamente, pueden afectar su labor, ya que los automovilistas les suelen dar dinero a ellos, dejándolos a un lado, esto según la perspectiva de los comerciantes locales y artistas.
También es común ver a las “Marías” con niños pequeños de la mano, o cargándolos sobre su espalda, lo que causa aún más conmoción en los ciudadanos, viéndose en la necesidad de tener que apoyarlas para que tanto ellas como los infantes que las acompañan puedan salir adelante. En la avenida Acereros de Monclova, se pudo entablar una conversación con una mujer, quien dijo que tenía 69 años de edad y provenía de la Ciudad de México y que solo visitaba la ciudad de Monclova en cuanto comenzaba diciembre, lo que confirma lo anteriormente dicho. Normalmente, suelen vestir con faldas, largas, rebozos para cubrirse del frío y el cabello trenzado.