La gresca inició por el espacio en una góndola.
En una escena que resalta la cruda realidad de los migrantes, un tren llegó a ciudad Frontera con más de 400 individuos de diversas naciones, incluyendo Venezuela, Haití, Honduras y Colombia. Este acontecimiento desencadenó una movilización policial intensa tras un violento altercado que puso de manifiesto las dificultades que enfrentan aquellos que buscan un refugio en tierras extranjeras.
El conflicto surgió cuando un ciudadano hondureño intentó desalojar a una familia conformada por Sandra, su hijo Diego y su pareja sentimental de un improvisado refugio.
La situación escaló rápidamente cuando el hondureño, frustrado por la resistencia de la familia, lanzó piedras, hiriendo al niño de aproximadamente 5 años y a un adulto que intento proteger a sus seres queridos.
La respuesta inmediata provino de un grupo de venezolanos que, al percatarse de la injusticia, se interpusieron en defensa de la familia agredida. Sin embargo, la escalada de violencia alcanzó su punto máximo cuando el agresor sacó un enorme cuchillo, amenazando a todos los presentes.
A pesar de la intervención y la llamada a la policía, el individuo logró escapar, dejando atrás una estela de preocupación y desesperación, ya que aseguró que cuando menos lo estarán volvería por todos.
El incidente pone de relieve las condiciones extremas en las que se encuentran los migrantes, no solo enfrentando los peligros del viaje, sino también la violencia entre sus propias filas.
Además, se ha conocido que entre los migrantes, especialmente niños y mujeres, existen casos de enfermedades respiratorias agravadas por pasar noches al descubierto, expuestos a las inclemencias del clima.
La situación subraya la necesidad urgente de medidas para garantizar la seguridad y el bienestar de los migrantes en su tránsito, así como la importancia de abordar las causas fundamentales de la migración. Ciudad Frontera se enfrenta a un desafío humano y social que requiere una respuesta coordinada y compasiva por parte de las diferentes autoridades.