El vehículo debe la Ciudad de Buenos Aires 54 mil 997 pesos por conceptos como exceso de velocidad y circular en vías prohibidas
El presidente electo de Argentina, Javier Milei, llegó hoy a la Quinta de Olivos para reunirse con el presidente saliente, Alberto Fernández. El encuentro es clave porque marca el inicio del traspaso de poder. Sin embargo, fue otra cosa lo que llamó la atención: el Volkswagen Vento 2009 negro en el que llegó, sentado en el asiento del copiloto.
La razón por la que llamó es que el vehículo cuenta con varias multas. En la Ciudad de Buenos Aires debe 54 mil 997 pesos argentinos en concepto de cinco infracciones, cuatro por exceso de velocidad entre 10% y 30%, y otra por circular por carriles o vías prohibidas. En la provincia de Buenos Aires tiene cuatro, todas en San Isidro, por ir más rápido de lo debido. Son de los últimos dos meses.
El detalle de las multas revela como “presunto infractor” a su padre, Norberto Horacio Milei, aunque él no habría sido quien manejaba el auto, según averiguó La Nación. Norberto Milei y la madre de Javier, Alicia Luján Lucich, estuvieron el domingo a la noche en el búnker para asistir a la consagración de su hijo. Con ambos, el presidente electo mantiene una relación distante.
En el trayecto del microcentro porteño a Olivos, llamó la atención que el presidente electo se bajó del auto para saludar a unos niños. La secuencia se produjo cuando el vehículo que trasladaba a Milei se detuvo al lado de una combi escolar. Entonces, el presidente electo saludó por la ventanilla a los alumnos que iban a bordo del segundo rodado, quienes le devolvieron el gesto con euforia. Ante dicha reacción, el economista no lo dudó: abrió la puerta y les extendió la mano a varios de los chicos que se estiraban para tocarlo desde la camioneta.
“¡Milei, una foto! ¡Una foto, por favor, Milei!”, le pidieron a los gritos varios de los niños en uno de los videos que fueron grabados por las cámaras de distintos canales de televisión y se viralizaron a través de las redes sociales. Aunque el líder de LLA no se sacó selfies, les dio la mano a todos los chicos que se asomaban por las ventanillas con una sonrisa en el rostro. Luego volvió a subirse al auto para retomar el viaje hacia Olivos.
Milei sigue contando con su seguridad privada y fuentes de la Policía Federal Argentina (PFA) aseguraron que todavía no cuenta con custodia oficial, aunque debería. Apuntaron a que todavía no está diagramada y no hubo contacto entre el jefe de la PFA y quien está encargado de la integridad física del libertario en este momento.