Justo cuando el contingente de la Policía Civil de Coahuila y de Seguridad Pública Municipal se lucían en el desfile revolucionario frente a las autoridades encabezadas por el alcalde Mario Dávila Delgado, un trabajador de limpieza municipal pasó frente a ellas con su carrito recolector de basura y respetuosamente saludó con un ademán de mano al edil.
El trabajador, de edad mediana, quiso pasar desapercibido entre el contingente, pero logró todo lo contrario, llamando la atención en el desfile del 20 de noviembre, ante el apuro del personal de Imagen de presidencia que le hacía señas para que se quitara.
El desfile se celebró en las calles de la zona centro con 30 instituciones y más de 2 mil participantes.