El hospital Juaneda Miramar en Mallorca presenció el nacimiento del primer bebé en Europa gestado por dos madres simultáneamente. Derek, como fue bautizado el pequeño, vio la luz este lunes con un peso saludable de 3,3 kilogramos, marcando un hito en la historia de la reproducción asistida.
Este emocionante logro fue posible gracias a la aplicación de una innovadora técnica conocida como sistema Invocell.
La técnica permite compartir el desarrollo del embrión entre ambas mujeres de la pareja, ofreciendo una experiencia única en el proceso de gestación compartida.
Las protagonistas de esta extraordinaria historia son Azahara, de 27 años, y Estefanía, de 30, quienes forman la pareja que ha desafiado las fronteras de la reproducción asistida.
El sistema Invocell consiste en la inserción de un dispositivo bajo el cuello uterino de una de las mujeres, actuando como una suerte de incubadora natural.
Aquí, el embrión se desarrolla durante los primeros días cruciales antes de ser cuidadosamente extraído por los médicos para luego ser implantado en el útero de la otra madre. Este proceso, aunque novedoso, ha resultado exitoso, marcando un avance significativo en el campo de la medicina reproductiva en Europa.
La gestación compartida no solo ofrece una experiencia más íntima para las mujeres, al permitir que el embrión se desarrolle dentro del cuerpo en lugar de un laboratorio, sino que también posibilita que ambas parejas compartan el emocionante viaje de la gestación.
Este método no solo representa un avance técnico, sino que redefine la conexión emocional de las madres con el proceso de gestación.
Los expertos señalan que este método de reproducción asistida no solo ofrece ventajas emocionales, sino que también proporciona una participación más activa de las mujeres en el proceso reproductivo.
Este hito pionero abre la puerta a nuevas posibilidades y desafía las convenciones en el campo de la fertilidad.