A diario, se descubren hallazgos de fetiches y rastros de brujería en el Panteón Guadalupe.
Los panteoneros optan por quemar cualquier objeto de este tipo que encuentran, especialmente durante los meses de noviembre y octubre, que son períodos con una mayor incidencia de estos objetos.
El director del panteón, José González, explicó que este aumento en objetos extraños se debe a la celebración de Halloween y, posteriormente, a la tradición mexicana del Día de Muertos.
Durante octubre y noviembre, aumenta la cantidad de objetos extraños que se encuentran entre las tumbas, y en ocasiones, las tumbas mismas son saqueadas.
El director señaló que la búsqueda de objetos extraños es un tema constante durante todo el año, pero durante estos meses se intensifica. Incluso han observado a personas merodeando en horarios no permitidos.
Sin embargo, al intentar solicitar ayuda a las autoridades, estas personas suelen marcharse de inmediato o desaparecer.
Para abordar este problema, se ha dado la estricta orden a los panteoneros de quemar cualquier objeto extraño de brujería que encuentren y posteriormente enterrar los restos en el mismo panteón.
Aunque inicialmente algunos jardineros tienen miedo, con el tiempo se acostumbran a estas situaciones y se centran en su trabajo o se apoyan en el resto del personal.