En la primera y en gran parte de la segunda temporada, la dupla Checo Pérez y Max Verstappen parecía un matrimonio en plena luna de miel con Red Bull.
La gran relación permitió al neerlandés cosechar dos mundiales de pilotos y junto al mexicano, consiguieron un campeonato de constructores para la bebida energética.
Todo marchaba a la perfección hasta el Gran Premio de Sao Paulo en 2022. A partir de ese momento, la relación no ha sido la misma.
En aquella edición, Max Verstappen ya llegaba a Interlagos como bicampeón de la Fórmula 1, motivo por el cual Red Bull no presentó actualizaciones ni mejoras para ese fin de semana. Por otra parte, Checo Pérez se situaba segundo en el mundial sobre su principal competidor Charles Leclerc.