Además de ser una festividad con un arraigo significativo entre la comunidad mexicana nativa de este país, el Día de los Muertos es una oportunidad para que el comercio obtenga importantes ganancias, no solo para aquellos que están establecidos, sino también para aquellos que prestan servicios para ayudar en la limpieza de las tumbas, cortando la hierba y pintando las letras de las lápidas. Cristóbal, un joven de escasos 16 años, se instala junto a sus amigos a la entrada del panteón de la colonia Buena Vista, ofreciendo sus servicios portando palas, cortadoras de zacate y botes de agua. Según lo manifestado, realizar este trabajo le deja una entrada a sus bolsillos de alrededor de unos mil 500 pesos, cubriendo la jornada que inicia a las 08:00 horas y termina cuando lo considera conveniente, pero suele ser ya cayendo el sol.
Hecho. El joven manifestó que tiene alrededor de dos años acudiendo al panteón, actividad que aprovecha como un extra para su sostenimiento, detallando que, en lo personal, no cobra por el trabajo, solo acepta lo que las personas deseen aportar, recibiendo desde 30 hasta 100 pesos.