El canciller cubano, Bruno Rodríguez lamentó que la Administración de Biden no haya variado ni un ápice la política del embargo, que resultó endurecida por su predecesor Donald Trump.
La Asamblea General de la ONU aprobó este jueves por abrumadora mayoría una resolución para exigir el fin del embargo económico y comercial estadounidense contra Cuba que ya ha superado seis décadas, a la que únicamente se opusieron dos países: Estados Unidos e Israel.
Este llamamiento, que viene haciéndose anualmente desde hace 31 años, recibió en esta ocasión 187 votos a favor, dos en contra y una sola abstención, la de Ucrania, un resultado aún más aplastante que el del año pasado, cuando hubo tres abstenciones y los mismos votos negativos.
Al completarse la votación y aparecer los resultados en la pantalla gigante de la Asamblea, muchos de los delegados presentes prorrumpieron en aplausos.
El canciller cubano, Bruno Rodríguez, que intervino justo antes de la votación ante la Asamblea, denunció que el bloqueo "viola el derecho a la vida, la salud, la educación y el bienestar de todas las cubanas y cubanos", y constituye "un acto de guerra en tiempo de paz".
Críticas por unilateral, anacrónico y lesivo con la población
La Asamblea celebra cada año una sesión específica para pedir el fin de este embargo impuesto en 1962 y que impide a Cuba hacer transacciones en dólares, comercializar con productos que atraviesen EE.UU. y que tengan un porcentaje mínimo del 10 % de partes elaboradas en ese país, así como utilizar el sistema financiero norteamericano.