Durante un recorrido, la primera dama, Jill Biden, pidió a los asistentes poner fotos de sus seres queridos fallecidos.
Por tercer año consecutivo, se instaló en la Casa Blanca una ofrenda por el Día de Muertos. Sin embargo, este año, por primera vez, se abrió al público.
La ofrenda se colocó en el Ala Este de la Casa Blanca. Destaca la imagen de la Virgen de Guadalupe, de la que el presidente Joe Biden es devoto. También hay flores de cempasúchil y zarapes.
A los latinos que trabajan en la sede del gobierno se les hizo una petición especial: colocar fotos de sus padres, abuelos y hasta mascotas fallecidos, para completar la ofrenda.