El piloto mexicano únicamente duró 18 segundos sobre la pista del Autódromo Hermanos Rodríguez, ya que terminó chocando con Charles Leclerc de Ferrari
Sergio Pérez arribó al Gran Premio de México con un solo objetivo: quedarse con el primer lugar del podio.
El piloto tapatío quería demostrar ante su público presente en el Autódromo Hermanos Rodríguez que es capaz de competir con el tricampeón del mundo, Max Verstappen.
Desafortunadamente para Checo, un choque con Charles Leclerc en la primera curva (Ferrari) no le permitió continuar la carrera.
El mexicano únicamente duró 18 minutos sobre la pista y abandonó su GP como local con lágrimas en los ojos tras la decepción de los aficionados.
El accidente que sufrió con el monegasco no pasó inadvertido por la prensa internacional que criticó fuertemente su actuación en nuestro país.
“Pérez dijo estar orgulloso de haberlo dado todo frente a sus paisanos, pero, honestamente, este resultado no hace más que sumarle a la enorme presión a la que está sometido. Cada vez, su situación luce más precaria en Red Bull”, publicó The Race en artículos sobre el percance del miembro de Red Bull.