El embajador Ibrahim Khraishi, también reclamó un embargo de armas a Israel, así como una intervención de esa comunidad internacional "para proteger las vidas de los civiles palestinos".
El embajador palestino ante la ONU en Ginebra, Ibrahim Khraishi, pidió a la comunidad internacional que suspenda sus lazos bilaterales con Israel y "detenga el apoyo militar, económico y político" a ese Estado hasta que cumpla con la ley internacional, en respuesta a su asedio de Gaza.
También reclamó un embargo de armas a Israel, así como una intervención de esa comunidad internacional "para proteger las vidas de los civiles palestinos", en una rueda de prensa organizada por la Asociación de Corresponsales ante las Naciones Unidas en Ginebra (ACANU).
"Pedimos además que condenen las acciones de Israel, conducentes a una limpieza étnica en Gaza, y tomen medidas para detener de forma urgente al desplazamiento forzoso de palestinos en ese territorio", aseguró.
También deben condenarse, aseguró, "las declaraciones de algunos altos cargos israelíes que constituyen incitaciones al genocidio", afirmó el embajador, quien mencionó en este sentido "la llamada del primer ministro Benjamin Netanyahu a convertir Gaza en un desierto".
Los 19 días de asedio a Gaza, en los que se ha bloqueado el acceso a la población de alimentos, agua, combustibles y electricidad, "son una flagrante forma de castigo colectivo en la que el hambre se usa como un arma", condenó el diplomático palestino.