El presidente de Brasil dijo que es necesario establecer una mesa de negociación, y conseguir que "Israel se quede con el territorio que es suyo, que está delimitado por la ONU"
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, dijo este martes que el ataque "terrorista" del movimiento islamista palestino Hamas contra Israel que desató la guerra en la Franja de Gaza no justifica "matar a millones de inocentes".
"No es porque Hamás cometió un acto terrorista contra Israel, que Israel tiene que matar a millones de inocentes", afirmó Lula al retomar su habitual transmisión semanal "Conversación con el Presidente", después de tres semanas de recuperación tras una cirugía en la cadera.
Desde al ataque de Hamas el 7 de octubre en territorio israelí en el que fueron asesinadas unas 1 mil 400 personas y alrededor de 220 fueron tomadas como rehenes, según las autoridades israelíes, Israel ha bombardeado de forma incesante la Franja de Gaza causando al menos 5 mil 791 muertes, según el movimiento palestino.
Lula dijo que es necesario establecer una mesa de negociación, y conseguir que "Israel se quede con el territorio que es suyo, que está delimitado por la ONU, y que los palestinos tengan derecho a tener su tierra (...) para que nadie tenga que invadir la tierra de nadie".
Según Lula, "la ONU está debilitada" y "si tuviera más fuerza podría tener una incidencia mayor".
Brasil preside actualmente el Consejo de Seguridad de la ONU, que vuelve a reunirse este martes para abordar el conflicto israelo-palestino, después de fracasar en dos oportunidades en su intento por aprobar una resolución.
Lula insta a preservar un corredor humanitario en Gaza
El presidente brasileño volvió a insistir en la necesidad de preservar las vidas de los niños, y "crear un corredor humanitario para garantizar electricidad en los hospitales y el ingreso de ayuda humanitaria", que comenzó a llegar a cuentagotas desde el sábado pasado.
En su alocución, Lula se refirió además a la violencia en Rio de Janeiro, donde el lunes milicias parapoliciales incendiaron más de 30 autobuses y la cabina de un tren, en protesta por una operación policial que mató a uno de sus miembros.
El gobierno pretende una "mayor intervención" de las fuerzas militares en los puertos para combatir el crimen organizado, y una "acción con más fuerza" de la policía federal en la vía pública.
Lula dijo que se siente "recuperado" de su operación de cadera el 1 de octubre y que ya puede andar con normalidad. Afirmó que todavía no puede viajar y que seguirá trabajando en Brasilia durante las próximas cuatro semanas.