La procuraduría se da a la tarea de realizar una investigación y buscar cuál es la mejor opción para el menor
Continuamente las riñas y discusiones que llegan a tornarse muy violentas y se registran en los planteles educativos, incluyendo primarias y secundarias, se debe a un patrón de sufrir agresiones físicas en casa o bien por la omisión de cuidados que tienen por parte de sus propios padres.
Martha Herrera, sub procuradora de la Procuraduría de los Niños, Niñas y la Familia, relató que, han atendido casos de niños o adolescentes quienes desde muy temprana edad tienen conductas agresivas, pero en la mayoría de las veces es por no observar un buen ejemplo en casa y en ocasiones el plantel no se da abasto para atenderlos es por eso que la Pronnif interviene evitando que su comportamiento siga.
Escuela. La procuradora dijo que, los planteles poseen su propio protocolo interno y en cuanto detectan a alumnos participantes en peleas o bien siendo agresivos con el resto de los compañeros, llaman a los padres para buscar el porqué de su comportamiento, donde en la mayoría de los casos la raíz viene desde la casa.
Intervención. En caso de que los padres no atiendan las necesidades que les fueron señaladas para corregir las conductas de sus hijos o en determinado momento que se evidencie una omisión de cuidados o vulneración de sus derechos en el hogar, la procuraduría se da a la tarea de realizar una investigación y buscar cuál es la mejor opción para el menor donde enviarlo con una familia de apoyo también podría ser posible. “Casos que nos han reportado porque hay conductas en alumnos y alumna que no son buenas y se presume que puedan ser por vulneración de derechos u omisión de cuidados por los padres, nos lanzamos checarlos” puntualizó.