La agrupación disfrutó junto al público mexicano de una velada llena de energía en el Palacio de los Deportes
El doble pedal en el bombo anunció que el hard rock había llegado al Palacio de los Deportes en punto de las 9:10 de la noche, ante un recinto ocupado hasta la última butaca, que acompañó toda la noche el rugido de la guitarra agresiva.
Así aparecieron en escena Damiano, Victoria, Ethan, y Thomas, que fieles al estilo glam rock que se volviera vanguardista entre las bandas de rock gracias a exponentes como David Bowie, lucieron los ojos maquillados, cortes de cabello muy largos, y pantalones negros de cuero.
"Dont wanna sleep", fue el primer tema del repertorio de la muy joven banda de rock italiana, cuyas edades de sus miembros no rebasan los 24 años de edad, pero cuyo desparpajo en escenario emula a leyendas como Jimmy Page, salvando las distancias.
Los tres hombres, delgados, muy pronto se quitaron las playeras, por su parte Victoria tardó un poco más, pero se les unió, quedando solo con dos parches en los pezones, actitud que explico el porqué miles de fans acudieron así al concierto, semi desnudos del pecho a la cadera.
Con las cabezas agitándose de un lado a por parte de los fans, pronto sonaron "Gossip", y "Zitti e Buoni", donde los brincos fueron generalizados, provocando que por momentos se sintiera cimbrar el graderío del Palacio de los Deportes, fue así que Damiano, imagen y vocalista de la banda dedicó sus primeras palabras.
"Hola México, muchas gracias, oigan, Estados Unidos, muy lindo, muy lindo, pero el público en México es otra cosa", dijo en un español casi perfecto, suficiente para que el público le agradeció el esfuerzo con un grito enardecido.
"Honey (are you coming?)", sencillo principal de su disco más reciente lanzado en marzo de este mismo año, parecía tener años de antigüedad, pues cuando el público sintió los primeros acordes recibió el tema coreandolo de principio a fin.
Fue cuando el cantante presentó la canción "Mamamia", que a mitad de su interpretación Damiano tuvo que pedir a todo el grupo que se detuviera, pues en la zona general de pie, los empujones ya estaban provocando que algunos asistentes no pudieran disfrutar del show, asfixiados por los brincos y la euforia que hacía que el público se abalanzarse contra la barricada que divide al público del escenario.
"Abran paso, necesito que abran paso, no hay prisa", dijo Damiano mientras ponía en orden al público más cercano a él, para una vez solucionado el incidente continuar con su show.
La cercanía de la banda fue tal, que Victoria, la bajista, no temió bajar de la tarima y caminar entre su público de un extremo a otro, perseguida mientras sonaba "Somebody Told Me", al tiempo que Thomas, el guitarrista se lanzaba al público flotando gracias a las manos que lo empujaban hacia el techo del recinto.
Peso Pluma enloquece a rockeros
Y cuando nadie lo esperaba, Thomas y Damiano, aparecieron en un pequeño escenario montado en medio del Palacio, donde cantaron una de sus canciones más solemnes e íntimas "The Loneliest", para después sorprender a su público homenajeando al mexicano Peso Pluma con su tema "Bailando Sola", rompiendo el rock por un momento, para traer los corridos tumbados junto a una guitarra acústica.
A partir de entonces todo fue entrega del grupo en cada riff agresivo de Thomas en la guitarra eléctrica, una Victoria que terminó desnudando sus pechos ante su público mexicano, Damiano lanzándose también al público más cercano a él, y un Ethan que casi rompió las tarolas en la batería por la energía con la que se entregó a ella.
"I wanna be your slave", fue como se despidió Maneskin de la capital, una banda que en un año pasó de un foro para 3 mil personas a atraer a poco más de 23 mil, ahora continuarán su gira por Latinoamérica en Bogotá, Santiago, Buenos Aires, Sao Paulo entre otras ciudades, antes de partir a Tokyo en lo que resta de su gira este 2023.