Comparecerán ante el juez para su imputación el hermano pequeño del terrorista y un primo del mismo.
Mohamed Mogouchkov, el yihadista ruso originario del Cáucaso que el pasado viernes mató a un profesor en un liceo de la ciudad francesa de Arras, reivindicó el atentado en nombre del Estado Islámico.
Jean-François Ricard, responsable de la Fiscalía Nacional Antiterrorista de Francia (PNAT), explicó este martes en una conferencia de prensa en París que Mogouchkov grabó un vídeo reivindicativo poco antes del atentado, para lo cual había comprado un teléfono esa misma mañana.
En ese mensaje, en el que criticaba a otras organizaciones integristas, en particular Al Qaeda, mencionaba su apoyo a los musulmanes en diferentes países, incluidos los palestinos, pero no relacionó en ningún momento su acción con el conflicto entre Israel y Hamás. Sobre todo, cargaba contra Francia y contra los valores republicanos.
Ricard anunció que, una vez finalizada la fase de interrogatorios, Mogouchkov va a ser presentado esta tarde a un juez instructor con vistas a su inculpación, en particular por los cargos de asesinato terrorista, tentativa de asesinato terrorista y asociación de malhechores con fines terroristas.
También comparecerán ante el juez para su imputación el hermano pequeño del terrorista, que le prestó "un cierto apoyo", en particular con las armas blancas que utilizó, y a un primo que estaba al corriente de que iba a cometer una acción criminal y no dio la alerta.
El fiscal precisó que pedirá prisión provisional para los dos hermanos Mogouchkov, pero no para el primo.
Otras 10 personas, la mayoría allegados, fueron interrogadas en relación con el atentado, pero al menos por ahora no se han encontrado elementos que puedan relacionarlos con el ataque terrorista y justifiquen su acusación, de forma que han quedado en libertad sin cargos.
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El terrorista nacido en la república rusa de Ingusetia, que tiene 20 años y había llegado a Francia de niño con el resto de su familia, grabó su mensaje de reivindicación en un móvil comprado ese mismo día, se dirigió al liceo Gambetta en el que había sido alumno y, a la entrada, se encontró con cuatro profesores a los que atacó.