Williamson Iribarren, mencionó además que el gobierno debe ser también más flexible con las empresas mexicanas
La deducción inmediata del 56 al 89 por ciento del Impuesto Sobre la Renta (ISR) que el gobierno federal ofrece a las empresas extranjeras que se instalen en México es benéfico para atraerlas y la inversión llegue, pues eso se traduce en empleos.
Lo anterior lo consideró Eugenio Williamson Iribarren, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) quien expresó que con eso incentivan la economía, pues esas empresasa preferirían México antes que a otros países y con ello van a llegar muchas inversiones. Las empresas reubicarían sus operaciones en suelo nacional como parte del nearshoring y estos descuentos fueron decretados por la federación."A final de cuentas, el gobierno lo hace con el afán de que vengan más empresas al país, son las bondades que trae consigo el nearshoring" dijo el empresario, quien expresó que primero Dios y se va a reflejar el beneficio.
Mencionó además que el gobierno debe ser también más flexible con las empresas mexicanas "Obviamente esos son ya derechohabientes que tiene cautivos, en este caso le coquetean al extranjero y una vez dentro, después de cierto tiempo ya les van cargando un poquito la mano referente a los impuestos".
Lo anterior ya una vez que están cautivos es cuando empiezan a sentir el aumento de impuestos, pero es una manera de atraer nuevas empresas "Más ingresos y eso es lo que debe generar el gobierno, más condiciones para que ellos tengan dinero y puedan hacer lo que quieran para que puedan dar sus apoyos de existencialismo y es una buena estrategia".
Los beneficios fiscales consisten en la reducción de los impuestos para la adquisición de nuevos equipos o maquinaria industrial, además de una deducción adicional del 25 por ciento durante tres años para gastos de capacitación de personal, enfocándose al capital humano con conocimientos científicos y técnicos.
De acuerdo a El Sol de México, estos estímulos serán enfocados Alos sectores para productos de alimentación humana o animal, fertilizantes o agroquímicos, insumos farmacéuticos, componentes electrónicos, maquinarias para relojes, equipo médico, baterías, contactos, fusibles, productos eléctricos, motores a gasolina, motores o turbinas para aeronaves.