El sorpresivo ataque a Israel perpetrado el sábado por Hamás se produjo en un momento en el que se busca la normalización de las relaciones entre ese país y Arabia Saudita.
El repentino ataque de Hamas contra Israel –el primero en su tipo- se produjo en un momento en el que la posibilidad de que Arabia Saudita normalice sus relaciones con Israel está sobre la mesa.
El reino saudita siempre ha enfatizado que este paso, y su reconocimiento de Israel, dependen de la implementación de la solución de dos Estados y de una respuesta justa al problema de los refugiados palestinos.
Pero la reciente aceleración de esta normalización, y el deseo de Riad de establecer una estrecha cooperación en materia de seguridad con Washington y de obtener su apoyo para su naciente programa nuclear con fines pacíficos, generó temores entre los palestinos, especialmente en Hamas, de que su causa sería ignorada en los nuevos acuerdos de seguridad y alianzas en la región.
Cualquiera que siga lo que ocurre en Medio Oriente se debe preguntar cómo el ataque de Hamás contra Israel y los bombardeos israelíes en Gaza pueden afectar el plan de normalización de las relaciones entre Arabia Saudita y el gobierno de Tel Aviv.