Ciudad de México.- El World Golf Championships (WGC) sale del Trump Doral, de Miami, para llegar al Club Chapultepec, donde se efectúa la edición 2017 de este prestigioso certamen, mismo que el actual presidente de Estados Unidos lamentó el adiós durante su campaña electoral.
Sin embargo, el cambio de sede no fue espontáneo. Detrás de esto hay dinero, intereses empresariales, patrocinadores, posturas diplomáticas y, por supuesto, el desacuerdo y la oposición de golfistas internacionales ante las políticas de Trump sobre México.
El torneo era patrocinado por la armadora de automóviles Cadillac, que incentivaba el certamen con alrededor de 14 millones de dólares anualmente para su realización; esto se acordó en un contrato multianual firmado en el 2010. Dos años después, la marca Trump adquirió el torneo, que invirtió cerca 250 millones de dólares para renovar las instalaciones del Doral.
La concesionaria, hace unos meses, ofreció 6 millones de dólares para renovar el contrato de derechos, en una reunión en donde estuvieron presentes Ed Williamson, Donald Trump y otros ejecutivos.
Posteriormente, Grupo Salinas se hizo presente en las negociaciones y adquirió el patrocinio del torneo para los próximos siete años, por un total de 19 millones de dólares.
Trump, previo a la ruptura con el certamen, afirmó que la PGA desconocía la situación de inseguridad que se vive en México.
A partir de este 2017, en las instalaciones del Club de Golf Chapultepec, comienza una nueva era de este torneo.