Tal vez no se trata de dar 10.000 pasos al día, o quizás esa no sea la única posibilidad que aporte beneficios contundentes a la salud. Ahora, un nueva investigación que reunió a especialistas de Oxford, de la Universidad de Tulane y de la de Pekín, sugiere que dar al menos 50 pasos y subir escaleras cada día podría reducir significativamente el riesgo de patologías cardíacas.
El estudio, publicado en Atherosclerosis, encontró que ascender más de cinco tramos de escaleras al día disminuye la probabilidad de enfermedad cardiovascular en un 20 %.
La enfermedad cardiovascular aterosclerótica (ASCVD), junto con la de las arterias coronarias y el accidente cerebrovascular, son las principales causas de morbilidad y mortalidad en todo el mundo, según detalla la Organización Mundial de la Salud (OMS).
“Las ráfagas cortas de subir escaleras de alta intensidad son una forma eficiente en cuanto al tiempo de mejorar la aptitud cardiorrespiratoria y el perfil lipídico, especialmente entre aquellos que no pueden cumplir con las recomendaciones actuales de actividad física -afirmó el coautor correspondiente, Lu Qi, presidente de HCA Regents y profesor de la Escuela de Salud Pública y Medicina Tropical de la Universidad de Tulane-. Estos hallazgos resaltan las ventajas potenciales de subir escaleras como medida preventiva primaria para ASCVD en la población general”.
Utilizando datos del Biobanco del Reino Unido recopilados de 450.000 adultos, el estudio calculó la susceptibilidad de los participantes a la enfermedad cardiovascular basándose en los antecedentes familiares, los factores de riesgo establecidos y los genéticos. Además, para completar su investigación, encuestaron a los participantes sobre sus hábitos de estilo de vida y la frecuencia de subir escaleras. La mediana del tiempo de seguimiento fue de 12,5 años.
El estudio encontró que subir más escaleras diariamente reducía especialmente el riesgo de enfermedad cardiovascular en aquellos que eran menos susceptibles. Sin embargo, Qi dijo que “el mayor riesgo de enfermedad cardíaca en personas más susceptibles podría compensarse efectivamente subiendo escaleras diariamente”.
Los participantes que dejaron de subir escaleras entre el inicio y la nueva encuesta exhibieron un mayor riesgo de sufrir algunas de las dolencias arterioescleróticas que se tomaron como parámetro, en comparación con aquellos que nunca subieron escaleras.
Qi promocionó la disponibilidad pública de escaleras como una forma accesible y de bajo costo de incorporar el ejercicio a las rutinas diarias. La actividad física regular, incluidos varios tipos de deportes, proporciona una protección importante contra las enfermedades cardiovasculares
El análisis de los datos recopilados anteriormente por los especialistas sobre una base de casi 2 millones de participantes revela que para 2016, más de una cuarta parte de la población adulta en todo el mundo no realizaba suficiente actividad física.
Las barreras comunes autoinformadas para practicar ejercicio regular incluyen problemas físicos o de salud, falta de recursos, incapacidad para permitirse el ejercicio estructurado o escasez de tiempo. Las cuales podrían superarse en parte subiendo escaleras, lo que promueve una mayor participación en la actividad física diaria, por ejemplo reemplazando los ascensores para distancias cortas.
Además, las ráfagas cortas de subir escaleras de alta intensidad son una forma eficiente de mejorar la aptitud cardiorrespiratoria y el perfil lipídico, especialmente entre aquellos que no pueden cumplir con las recomendaciones actuales de la OMS. “Trabajos anteriores se han centrado principalmente en un grupo de factores de riesgo de ASCVD, como el síndrome metabólico y la diabetes. Este estudio proporciona evidencia novedosa de los efectos protectores de subir escaleras sobre el riesgo de experimentar estos trastornos, particularmente para individuos con múltiples factores que pueden contribuir a experimentar una dolencia de este tipo”, concluyó Qi.