La cinta, filmada en la pandemia, estrena este fin de semana en más de 50 ciudades de la República Mexicana
Hace dos años Tatiana del Real estaba deprimida: las cosas laborales aún no se regularizaban por la pandemia de Covid-19 y, como muchas personas, estaba desesperada por salir a hacer cosas.
Fue cuando le llegó la invitación para hacer una película independiente, "Carretera 15", ambientada en 1989 y cuyo rodaje en buena parte se realizaría en una carretera, y rápidamente aceptó.
“Yo decía: rescátenme, necesito estar afuera”, cuenta divertida la actriz que hace casi una década dio vida a Mary Boquitas en el filme "Gloria".
Del Real se trasladó a Guadalajara para sumarse a un pequeño elenco con Cristóbal Orellana ("High School Musical: el desafío"), Frank Rodríguez ("My firts movie") y el debutante Paul Pineda, cobijados por un bajo presupuesto.
Tenían la misión de contar la historia de cuatro amigos que deciden viajar de la capital jalisciense a Tequila para pasar una buen fin de semana, hasta que un incidente vehicular comienza a llevarlos al límite.
Así inició la película que estrena este fin de semana en más de 50 ciudades de la República Mexicana, cuyo rodaje quizá no eran las óptimas, pero sí grandes para aprender.
“El baño estaba lejos y de plano había momentos en que decía: perdón chavos, me voy al matorral a hacer pipí (risas), el sol estaba a todo lo que da y a veces el director nos decía que mantuviéramos el tono en lo que pasaba un coche y era agotador eso, pero se aprende muchísimo”, destaca Del real.
En el filme da vida Lulú, joven engreída que procede de una familia tradicional.
“Tiene una actitud mandona por ser hija única, de esto es mío y esto no me gusta, y quiere romper un poco eso. Tiene un novio (Orellana) pero es una relación con mucha toxicidad”, apunta.
El guión de "Carretera 15" fue escrito por el también actor Rodríguez hace casi una década. Lo situó a finales de los 80 porque para él era el término de una época y todo lo que pasa transcurre en un sólo día.
“En carretera se decidió filmar de manera cronológica para que todo machara, como el maquillaje”, destaca Tatiana.
La dirección corrió a cargo de Rafael Altamira y la producción fue responsabilidad de Imaginary Spirit Films, Lylu Films y Cine Guerrilla.
Rodríguez, el actor, también fungió de una especie de asesor histórico para el departamento de arte.
“Todo lo que se ve en la película como discos y teléfonos es de mi colección privada. A veces veía que los de arte ponían una bonita pared, pero con un poster de “Vuela, vuela” de Magneto, que no podía estar porque eso era de los 90. Eran esas cositas que había que cuidar bien”, apunta.