Los profesionales del combate contras las plagas en Francia han registrado un aumento del 60 por ciento de clientes por chinches entre marzo y septiembre.
Los profesionales del combate contras las plagas en Francia han registrado un aumento del 60 por ciento de clientes por chinches entre marzo y septiembre de este año, aunque critican el alarmismo mediático sobre la actual plaga de chinches y aseguran que el país es seguro para los turistas.
"Como he podido escuchar en algunos medios del otro lado del Atlético, ¡invasión de chinches! Para nada. Hay un problema, somos conscientes de ello y hay una solución", declaró a EFE Stéphane Bras, portavoz de la asociación nacional que engloba a unas mil 200 empresas de lucha contra los parásitos (CS3D).
En primera línea en el combate contra los chinche, que han generado una oleada de psicosis en Francia, sobre todo en París, Bras ofreció una de las pocas estimaciones sobre el alcance del problema.
Las empresas del sector recibieron un 60 % más de llamadas de clientes entre marzo y septiembre de 2023, en relación al mismo periodo de 2022.
El portavoz, no obstante, aclaró que, a pesar del aumento, "no se trata de una nueva oleada" de chinches lo que padece Francia y sí "un empeoramiento" de una situación que se arrastra desde hace tiempo, agravada por la reapertura de los vuelos transcontinentales tras el Covid.
Un "empeoramiento" que, según los relatos vistos en las redes, ha llevado a estos minúsculos insectos a anidar en numerosos lugares públicos, como salas de cine, metros y trenes, sobre todo en París, un extremo ya desmentido por el ministro de Transporte, Clément Beaune, y matizado por Bras.