José Alfredo Reyes, de 35 años de edad, se encontraba desempleado, es por eso que se aventuró a trabajar un coche con el servicio por aplicación, pero le retiraron su auto por segunda vez en un operativo de transporte, por no contar con los permisos necesarios.
Desanimado y triste, comentó que lo único que quiere es trabajar, pues dependen de él su esposa y dos hijos y desde hace un año que lo reajustaron de una empresa local no ha podido conseguir un empleo, por eso, invirtió en comprar un coche para trabajar por su cuenta y de ahí está pagando el financiamiento, pero en la primera ocasión que lo sancionaron pagó 7 mil pesos y ahora desconoce cuánto más será.
Incertidumbre. Manifestó que sacó el permiso del estado, pero el municipio no ha querido dar autorización, porque quiere que la aplicación se acerque con ellos, pero eso es imposible, porque son grandes cadenas y él sólo usa ese sistema para dar el servicio y está dispuesto a pagar un permiso, pero no les han dado autorización y lo que desea es poder trabajar como cualquier ciudadano por necesidad.