El padre Eduardo Neri recalcó las consecuencias de no ceder es por eso que la sociedad sigue sin trabajo.
En la misa dominical de la Parroquia Santiago Apóstol de Monclova, dirigida por el Padre Eduardo Neri, mencionó que actualmente la sociedad carece de principios éticos, pues no se respetan y no se ejercen en el servicio público. Esta es una de las razones por las que el latinoamericano o mexicano ante los actos de injusticia y corrupción se dejan llevar, cayendo en trampas y tentaciones de aparentar ser una cosa, pero de vivir otra y puso como ejemplo la situación actual de la empresa Altos Hornos de México.
El padre relató que las personas no alcanzan a entender por qué el asunto de la crisis de dicha empresa no se destraba, pero una de las realidades, es que quienes están de responsables y les toca pensar y planear una solución, antes que todo tienen que ceder y perder algo, pero el problema aquí, es que ellos no tienen la mínima intención de poner de su parte con tal de no perder nada, simplemente buscan ganar sin importar que el pueblo siga sufriendo las necesidades y consecuencias de los malos actos. “Seguimos sin trabajo ante la situación de la empresa y todo es porque los responsables no quieren ceder, siguen montados en su mancho sin importar que el tiempo siga corriendo”, aclaró el sacerdote.
Situaciones. Destacó que este tipo de ejemplos también funcionan para otras situaciones, pues actualmente, hay niños y jóvenes que sufren en sus hogares las diferencias de sus papás, lo que lleva a las separaciones y divorcios, esto ante la misma razón de no querer ceder, reconocer sus errores, tener humildad, pedir perdón y la realidad es que en la vida cristiana uno tiene que reconocer que a veces se cometen equivocaciones y es necesario pedir perdón, pero sobre todo saber perdonar.
Congruencia. “Estamos muy lejos de vivir la justicia, pues los líderes, políticos, empresariales, religiosos, el servicio público o incluso los padres de familia, si realmente creyéramos en Jesús, no tendrían por qué suceder tantos males, pero lamentablemente, todo esto pasa porque no somos totalmente congruentes, ya que, esto implicaría ser sinceros, humildes, abrir nuestros ojos a los de más, ser compartidos, respetar los dones, talentos y habilidades de los otros o buscar armonizar las diferencias, pero no, aquí solo se busca ganar, quitarle a los otros, desplazarlos y no buscar el bien común, si no, el individual”, declaró Eduardo Neri.