Los gatos son lindos y cariñosos pero muy territoriales, si de pronto invades su privacidad pueden tornarse un tanto agresivos y lanzar arañazos o mordeduras.
Estas heridas pueden causar una infección causada por una bacteria llamada Bartonela o Bartonella henselae.
La enfermedad se propaga a través del contacto con un gato infectado (mordedura o arañazo) o por la exposición a las pulgas de gato. También puede propagarse a través del contacto con la saliva del gato sobre la piel o las superficies mucosas rotas como las de la nariz, la boca y los ojos.
Los gatos son infectados a través de picadura de pulgas y en ellos los síntomas son más visibles mientras que en los humanos tardan en aparecer.
Una persona que haya tenido contacto con un gato puede mostrar síntomas comunes como:
- Protuberancia (pápula) o ampolla (pústula) en el sitio de la lesión (por lo general, es la primera señal)
- Fatiga
- Fiebre (en algunas personas)
- Dolor de cabeza
- Inflamación de los ganglios linfáticos (linfadenopatía) cerca de la mordedura o el arañazo
- Molestia general (malestar general)
Los síntomas menos comunes pueden ser:
- Inapetencia
- Dolor de garganta
- Pérdida de peso
Esta enfermedad es difícil de diagnosticar. Se realiza una prueba sanguínea de inmunofluorescencia indirecta
Generalmente, la enfermedad del arañazo de gato no es grave. Tal vez no se necesite un tratamiento médico. En algunos casos, el tratamiento con antibióticos, como azitromicina, puede ayudar. Se pueden emplear otros antibióticos, como claritromicina, rifampina, trimetoprim-sulfametoxazol o ciprofloxacina.
En personas con VIH/SIDA y otras, que tienen un sistema inmunitario debilitado, la enfermedad del arañazo de gato es más seria. Se recomienda el tratamiento con antibióticos.
De tener un sistema inmune debilitado, esta enfermedad puede causar complicaciones un poco más serias como encefalopatía, neurorrentinitis, osteomielitis o Síndrome de Parinaud (conjuntivitis granulomatosa con adenopatía).
Como en todas las infecciones, existen medidas que se pueden tomar para evitar la propagación.
Para prevenir la enfermedad del arañazo de gato:
- Lávese las manos a profundidad con jabón y agua después de jugar con su gato. Lave especialmente cualquier mordida o arañazo.
- Juegue delicadamente con los gatos para que no rasguñen ni muerdan.
- No permita que un gato le lama la piel, ojos, boca, o heridas abiertas o cicatrices.
- Utilice un control de pulgas para disminuir el riesgo de que su gato desarrolle esta enfermedad.
- No toque a los gatos callejeros.