Un estudio que se publica hoy en «Nature Medicine» proporciona información sobre por qué algunas personas pueden ser más resistentes a la enfermedad de Alzheimer que otros. Algunas personas que portan mutaciones en genes que se sabe que causan la enfermedad de Alzheimer de inicio temprano no muestran signos de la afección hasta una edad muy avanzada, mucho más tarde de lo esperado. Los hallazgos pueden conducir a estrategias para retrasar o prevenir la afección.
La mutación identificada aumenta la función de la proteína Reelin y con ello se promueve la supervivencia de las neuronas. Se trata de una variante genética rara recientemente identificada del gen RELN (que codifica la proteína de señalización reelina) y que según el está asociada con más de dos décadas de resistencia a la enfermedad de Alzheimer autosómica dominante (ADAD).
Se trata del segundo caso de tal resiliencia procedente de una gran familia de más de 6.000 miembros vivos de Colombia, que no desarrolló problemas cognitivos leves casi dos décadas después de la edad típica de inicio. «La investigación descubre una nueva vía molecular que podría ser una diana terapéutica para aumentar potencialmente la resiliencia en todas las formas de la enfermedad de Alzheimer», explica a ABC Salud Joseph F. Arboleda-Velásquez, del Harvard Medical School (EE.UU.) y uno de los autores de este trabajo.
La ADAD es una forma hereditaria rara de la enfermedad de Alzheimer, que es más comúnmente causada por mutaciones específicas en el gen PSEN1 que codifica la proteína transmembrana presenilina 1. Se
El caso previo se trataba de una mujer que portaba la mutación E280A en un gen llamado Presenilin 1 (PSEN1), que se ha demostrado que causa la enfermedad de Alzheimer de inicio temprano.
Asimismo, tenía dos copias de una variación genética llamada ChristChurch, llamada así por la ciudad de Nueva Zelanda donde se encontró por primera vez en el gen APOE3 (APOE3ch). Dicha mujer permaneció sin problemas cognitivos durante casi 30 años después de la edad esperada de inicio, a pesar de que también mostró evidencia de la enfermedad de Alzheimer en el cerebro.
Lo que ha hecho el equipo de Francisco Lopera, Yakeel T. Quiroz, Joseph F. Arboleda-Velásquez y Diego Sepúlveda-Falla es analizar los datos clínicos y genéticos de 1.200 personas de Colombia que portan la mutación PSEN1 y están predispuestas a ADAD.
Así, identificaron a un hombre que permaneció cognitivamente intacto hasta los 67 años de edad a pesar de tener la mutación PSEN1 para la ADAD de inicio temprano.
Los autores compararon a esta persona con el caso de la mujer con ADAD. Ambas personas mostraron una patología amiloide generalizada y considerable en el cerebro, que es un sello patológico de la enfermedad de Alzheimer.
Sin embargo, explica a ABC Salud Diego Sepúlveda-Falla, de la Universidad Medical Center Hambug-Eppendorf.
Identificaron a un hombre que permaneció cognitivamente intacto hasta los 67 años de edad a pesar de tener la mutación PSEN1 para la ADAD
(Alemania), «hubo una agregación limitada de tau (una proteína estabilizadora de microtúbulos en el cerebro) en la corteza entorrinal, una región del cerebro que se ve afectada característicamente en las primeras etapas clínicas de la enfermedad de Alzheimer».
Los autores realizaron la secuenciación genética y encontraron que esta segunda persona albergaba un tipo diferente de mutación: una nueva variante rara de RELN (H3447R denominada COLBOS).
Explica Sepúlveda-Falla que esta mutación «causa un ligando RELN, una molécula de unión, que puede ser más eficaz para limitar la agregación de tau, pero se necesita más investigación para explorar esto».
Las proteínas APOE y reelina involucradas en la protección de estos individuos funcionan como ligandos de receptores celulares comunes y los autores indican que esto podría sugerir un mecanismo común para la resistencia al Alzheimer.
Los hallazgos resaltan una vía molecular previamente desconocida que puede conferir resiliencia al deterioro cognitivo en personas con mayor riesgo de enfermedad de Alzheimer.
«Actualmente hay una necesidad grande de terapias más efectivas contra el Alzheimer y este descubrimiento nos indica una nueva diana terapéutica que puede proteger por varias décadas, señala a ABC Salud Arboleda-Velásquez.
El estudio de estos individuos puede revelar nueva información sobre variantes genéticas que reducen el riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer y otras formas de demencia, concluyen los investigadores.