A la frontera han llegado cientos de venezolanos huyendo del mal gobierno.
Teniendo el firme objetivo de llegar a los Estados Unidos sin importar todos los riesgos existentes en el camino, adversidades y complicaciones que pudieran afectar su integridad o la de sus familias, es como llegan los migrantes a la frontera, argumentando que lo único que buscan es una mejor vida y huir de la violencia, pobreza y dictaduras que existen en sus países.
Jorge Parra, un migrante venezolano, llegó acompañado de su esposa e hijas hasta las márgenes del río Bravo. Su rostro expresaba síntomas de preocupación por saber si lograría cruzar y, al mismo tiempo, temor por ser deportado, señalando que salió de Venezuela porque el Presidente Nicolás Maduro los tiene viviendo como mendigos a pesar de ser uno de los países más ricos del mundo. Busca poder ejercer su carrera de politólogo en Estados Unidos y una mejor calidad de vida, con la intención de llegar al estado de California.
El migrante venezolano expresó que fueron cerca de 30 días lo que duró su travesía para poder llegar a la frontera, atravesando la imponente selva del Darién. Resaltó lo difícil y complicado que es esta travesía, rodeados de persecución por parte de Nicolás Maduro y de los países por donde van de tránsito, quienes no han entendido que lo único que buscan es bienestar sin querer dañar ciudades. Reconoció a México por su buen trato hacia quienes huyen de una dictadura, señalando que le tocó vivir el gobierno de Hugo Chávez, al cual consideró peor que Maduro.
El grupo de migrantes espera el momento para introducirse en las turbulentas aguas del río Bravo y burlar la barrera de alambres de púas que ha colocado el gobierno de Texas para impedir su paso. Sin embargo, a pesar de todos estos obstáculos, persisten en su objetivo.