Chivas y Tuzos se van con un punto, que a los de Hidalgo les sabe amargo por lo del penalti
Jugar ante un endeble Pachuca era el escenario ideal para que las Chivas se reencontraran e intentaran trabajar como lo hicieron en las primeras tres fechas del Apertura 2023, pero no fue así y un punto producto de un 0-0 es lo que se llevaron del partido ante los Tuzos.
Miguel Jiménez fue figura, atajó un penalti a los 80 minutos de Illian Hernández y le dio respiro a lo que parecía otra tragedia para los tapatíos.
El Guadalajara arrastra un mal, que más allá de si es por problemas internos o de falta de carácter en la cancha, muestra que el “prometedor” inicio de torneo no era otra cosa que un espejismo; parece que Veljko Paunovic y sus dirigidos siguen atrapados en la final que perdieron contra Tigres, porque ni la goleada de la semana pasada ante América los hizo despertar.
Ese “mal momento” que Fernando Hierro no quiso llamar crisis ha evidenciado las carencias de los rojiblancos; ni los refuerzos, ni el abucheado Alexis Vega ni sus intentos por hacer daño al rival colaboran con algo positivo.
En el segundo tiempo ingresaron Víctor Guzmán y Vega, con la esperanza de al menos aumentar las pocas de peligro que habían generado; la realidad fue otra, fuera de lugares en el área tuza en remates de Carlos Cisneros, Ricardo Marín y el propio Piojo Alvarado, además de llegadas con un balón que terminaba muy muy lejos de su objetivo principal, el arco.
Chivas y Tuzos se van con un punto, que a los de Hidalgo les sabe amargo por lo del penalti y a los de Chivas a nada, porque no funcionan, no marcan, se salvan de recibir y no dejan de exhibir que “lo que un día fue no será”.